Madrid, 1 abr (EFE).- Mientras el Real Madrid dispondrá de nueve días para preparar la primera de las dos batallas ante el Manchester City en los cuartos de final de la Liga de Campeones, el equipo de Pep Guardiola se jugará sus opciones de defender la corona de la ‘Premier League’ con dos partidos clave, ante Aston Villa y Crystal Palace, antes de visitar el Santiago Bernabéu con un desgaste mayor.
En las quejas del calendario que el pasado curso, con el Real Madrid en la disputa de un mayor número de competiciones, compartían Carlo Ancelotti y Guardiola, se ha quedado sólo el técnico catalán. La circunstancia de que la final de la Copa del Rey paralice el fútbol español beneficia al Real Madrid ante un Manchester City que no tendrá descanso ni margen para fallar en la ‘Premier’.
Dos empates consecutivos ante los dos rivales con los que pelea por el título, Liverpool y Arsenal, dejan al equipo de Guardiola con poca opción de rotar jugadores en un calendario que no tiene piedad antes de acudir a la cita del Bernabéu.
Tercer clasificado, el City recibirá en el Etihad Stadium al cuarto, el Aston Villa de Unai Emery, el miércoles (21:15 horas), en el tercer partido trascendental consecutivo que encara en la liga inglesa. Lejos de poder descansar el fin de semana como hará el Real Madrid, Barcelona o Atlético de Madrid en España, o equipos como el PSG en Francia, los de Guardiola visitarán el sábado (13:30 horas) el estadio del Crystal Palace.
«El Madrid tiene nueve días para preparar nuestro partido. Nueve días», recalcó en rueda de prensa Guardiola. «Juega el fin de semana y hasta nuestro partido no juegan más. Me gustaría pedir algún día de descanso pero la diferencia es muy grande. No hay opción», lamentó.
«Cuando me preguntan por el calendario doy mi opinión pero UEFA tiene su propio negocio, FIFA tiene el suyo y las televisiones sus propios negocios, pero yo también tengo mi negocio y lo que hago es defender a mi club. Y la vida en mi club es muy complicada, partido cada tres días, cada tres días, cada tres días. Otros no viven esta situación», añadió.
Las palabras de Guardiola fueron muy similares a las que la pasada temporada pronunciaba Ancelotti.
«Es un calendario increíble, no se para nunca porque LaLiga, la Federación, la FIFA, la UEFA quieren hacer lo suyo y afecta más a los jugadores y a no poder tener días de descanso. A mí me aburre un poco descansar, pero tenemos que parar un momento y pensar en los jugadores. Si se cansan, cerramos», llegó a decir el 1 de febrero cuando denunció que se había superado cualquier «límite» que pudiesen soportar los futbolistas.
Un año y dos meses después, el técnico italiano modificó su discurso al ver que el Real Madrid llegará mucho más descansado a la gran cita europea con el Manchester City. «Veo bien el calendario», dijo sin contener la sonrisa tras el triunfo ante el Athletic Club.
«Me parece que ellos evidentemente tienen un calendario más complicado. Esto es el fútbol moderno y en este sentido tenemos una pequeña ventaja que no va a determinar el resultado del partido. Tenemos el tiempo necesario de prepararlo bien para jugar mejor», añadió ‘Carletto’.
El técnico madridista ha podido dar incluso dos días y medio de descanso en un momento importante de la temporada, en el que se deciden títulos. Servirán para que los catorce futbolistas que se marcharon con sus selecciones en el último parón, recuperen fuerzas y para que el brasileño Éder Militao mejore su físico tras recuperarse de su grave lesión de rodilla. Con muy pocas opciones de tener minutos en la ida pero ya con el alta competitiva.
Thibaut Courtois y David Alaba serán las únicas bajas del Real Madrid mientras que Pep Guardiola anda pendiente de recuperar a su portero titular, el brasileño Ederson, su lateral derecho Kyle Walker y a John Stones, indiscutible como centrocampista en fase de ataque y que refuerza la defensa cuando es necesario en fase defensiva. En el último partido perdió a uno de sus centrales, el neerlandés Nathan Aké por un problema muscular.