Madrid, 30 abr (EFE).- A la espera de incorporarse los últimos datos para el computo global, todo apunta a que abril pasará a convertirse en «uno de los seis o siete más secos de la serie histórica» y eso a pesar de las lluvias generalizadas de los últimos días, especialmente abundantes en zonas como Cataluña y Baleares.

A nivel térmico, abril ha sido además un mes con temperaturas altas en su conjunto a pesar del ambiente frío de los últimos días.

Con datos aún provisionales, abril ha sido un mes muy cálido, con una temperatura media superior en más de 1º a su valor normal, según ha informado el portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), Rubén del Campo.

A nivel de precipitaciones, durante las 24 horas previas a las 9:00 horas de la mañana de la jornada de este martes, destacaban registros como los 69 litros por metro cuadrado en el aeropuerto de Barcelona.

A modo ilustrativo, el portavoz de la Aemet ha explicado que, en un mes completo de abril, en dicho recinto aeroportuario, suelen recogerse unos 40 litros por metro cuadrado.

Otro dato significativo en la región catalana han sido los 65 litros recogidos en Montserrat, de acuerdo a los datos.

«Están siendo lluvias beneficiosas para aliviar la sequía meteorológica, pero no para paliarla por completo», ha puntualizado Rubén del Campo.

A la espera del recuento global con los últimos datos del mes, abril ha sido «en general seco en el conjunto de España, con unas precipitaciones que, hasta el 28 de abril no llegaban ni a la mitad del valor normal para este mes».

Probablemente abril de 2024 quedará «entre uno de los seis o siete más secos de la serie histórica», aunque a la espera aún para confirmarlo a los datos definitivos.

«Las lluvias del mes de abril han quedado para el conjunto de España claramente por debajo de lo normal», ha añadido el portavoz de la Aemet.