Barcelona, 28 dic (EFE). – El Barça cierra este domingo (20:45 horas) el año 2024 con un clásico liguero en el WiZink Center de Madrid en el que espera hacer ‘clic’ y empezar a remontar el vuelo tras sufrir seis derrotas en diez partidos entre la Euroliga y la Liga Endesa en el mes de diciembre.
Sumido en una mala dinámica de juego y resultados, el equipo de Joan Peñarroya confía en que el partido ante el Real Madrid signifique un revulsivo para afrontar 2025 con algo más de esperanza.
Además, lograr un triunfo ante un rival directo -el conjunto blanco suma ocho victorias por las siete de los azulgrana- acercaría al Barça a sellar la clasificación para la próxima edición de la Copa del Rey.
El duelo llegará tan solo 48 horas después de que el conjunto azulgrana cayera ante Estrella Roja (74-78) en el Palau Blaugrana tras un partido igualado que se decidió en los últimos segundos.
Después de esta última derrota, el cuadro catalán ocupa la undécima posición en la Euroliga y se ha situado fuera de los puestos que dan acceso a jugar la repesca para disputar las eliminatorias por el título.
En la Liga Endesa, el Barça, séptimo clasificado, buscará la segunda victoria consecutiva, tras el triunfo logrado el pasado domingo ante el Morabanc Andorra (105-79). No será fácil, ya que encadena cuatro derrotas seguidas lejos del Palau Blaugrana, donde no gana desde el 13 de octubre, cuando derrotó al CB Canarias (91-95).
A estos últimos cuatro precedentes como visitante se suma la racha azulgrana sin ganar en el WiZink Center, cuya última victoria se remonta al 20 de junio de 2023, cuando venció por 82-93 para proclamarse campeón de la Liga Endesa.
Y es que el conjunto blanco es la ‘bestia negra’ del Barça, ya que en los últimos diez enfrentamientos directos los blancos acumulan ocho triunfos, cinco de ellos consecutivos,
En el más reciente, disputado el pasado 28 de noviembre en el Palau Blaugrana, el Real Madrid se llevó el encuentro de la jornada doce de la Euroliga tras dos prórrogas (90-97).
El duelo en el WiZink Center enfrentará a dos equipos que a estas alturas de la temporada solo les separa una victoria en la Liga Endesa, pero cuyas dinámicas son totalmente opuestas, con un Real Madrid al alza tras cuatro victorias en los últimos cinco partidos.
En el último tramo del año, el conjunto azulgrana está notando la exigencia del calendario y pese a que poco a poco va recuperando efectivos -Chimezie Metu y Raul Neto recibieron el alta médica en el último partido-, la dependencia sobre los puntos de Jabari Parker o Jan Vesely es notoria, siendo el checo quien mejores estadísticas globales presenta con más de 10,9 puntos por partido, 4,8 rebotes y 13,8 créditos de valoración.
Al equipo de Joan Peñarroya le falta equilibrio en posiciones exteriores. Desde la lesión del argentino Nico Laprovittola, Kevin Punter se ha erigido en el líder ofensivo del equipo, especialmente en la Euroliga, donde promedia más de 18 puntos por partido, unos guarismos sensiblemente inferiores en la ACB (10,3). El escolta estadounidense, sin embargo, le está faltando lucidez anotadora en los finales ajustados, algo que ha notado su equipo en las últimas derrotas.