La Empresa Municipal de Aguas (Emasa) ha lanzado una licitación para la renovación de dos secciones de las tuberías principales de abastecimiento en la Alameda Capuchinos
Este proyecto tiene como objetivo rehabilitar 1.2 kilómetros de tuberías de fibrocemento que tienen más de 40 años de antigüedad y sufren numerosas fugas debido al asentamiento del terreno y al mal estado de las uniones entre los tubos.
Dado que estas tuberías discurren por vías urbanas con un alto tráfico vehicular, la sustitución tradicional sería compleja y prolongada. Por lo tanto, se ha optado por la rehabilitación interior utilizando un sistema de manga continua que evita la apertura de zanjas en la calle. Este enfoque novedoso, previamente empleado por Emasa en obras de saneamiento, consiste en revestir la tubería con una manga continua o tubería flexible que crea una nueva conducción en el interior.
La nueva tubería contará con tres capas: dos de polietileno en el interior y exterior, y una capa intermedia de malla tejida de Kevlar que le proporcionará resistencia a la presión interna y al terreno circundante. La manga continua asegurará la estanqueidad total, ya que no habrá juntas en la nueva sección. Esta metodología permite que el comportamiento de la nueva conducción sea independiente de la existente.
La elección de este sistema de rehabilitación se basa en minimizar las molestias para la población. La realización de una obra de reposición a cielo abierto de este tamaño tendría un gran impacto tanto en los residentes cercanos como en el tráfico, ya que se lleva a cabo en vías con un alto flujo de vehículos. Este método permite reducir los plazos de ejecución, así como los costos sociales y económicos. Se espera que la duración de esta operación sea de un máximo de cinco semanas, de las cuales las tres primeras se destinarán a la fabricación y transporte de la tubería flexible o manga. Las empresas interesadas pueden presentar sus ofertas hasta las 15:00 horas del 31 de octubre.
Según los términos del pliego de condiciones, Emasa se encargará de las labores iniciales de la actuación, como la realización de catas necesarias para la instalación de las mangas, la rotura de la tubería existente en los puntos a intervenir, la coordinación con el Área de Movilidad para realizar los cortes necesarios y, una vez realizada la obra, la conexión de las secciones rehabilitadas entre sí y con el resto de la red. El contratista adjudicado se encargará de inspeccionar cada tramo de conducción a rehabilitar mediante una cámara, limpiar la tubería antes de la instalación de la nueva manga y realizar las pruebas de presión necesarias.