España, un país en el que partidos y sociedad son europeístas y la UE no se discute

EPA2624. BRUSELAS (BÉLGICA), 21/06/2018.- Una bandera de la Unión Europea ondea ante la sede de la Comisión Europea en Bruselas (Bélgica) hoy, 21 de junio de 2018. La Comisión Europea (CE) pidió hoy a los Veintiocho explorar la creación de centros regionales de "desembarco" de inmigrantes en el Norte de África, de cara a la próxima cumbre de líderes en la que la migración irregular será uno de los temas centrales de la agenda. EFE/ Stephanie Lecocq

Cristina Lladó

Madrid, 30 jun (EFE).- Los principales partidos políticos se declaran europeístas convencidos y se diferencian tan solo en cómo valoran las actuaciones concretas de la UE, salvo Vox que cuestiona el excesivo control que emana de las instituciones europeas y aboga por más nacionalismo frente al “modelo federalizante” de la unión.

Analistas, politólogos y profesores consultados por EFE subrayan también el hecho de que, a diferencia de lo que ocurre en otros países, en España la pertenencia a la UE y las políticas europeas están fuera del debate político.

La cuestión es sencilla: los partidos no quieren ir en contra de la opinión mayoritaria de los españoles y “nadie va a gastar energía política en defender algo que no da votos”, asegura el investigador principal del Real Instituto Elcano Ignacio Molina.

“En un país que discute por todo, no discutimos de Europa; ni siquiera Vox y Podemos, sus peleas no han sido nunca por Europa y eso que somos un país muy polarizado», dice.

“Aquí nos peleamos por la religión, por el sí es sí, por los toros… mientras que en Italia, Suecia o Francia discuten acaloradamente sobre Europa y todos los asuntos europeos”, apunta Molina.

Haciendo un repaso de los partidos, este analista señala que Vox “no es europeísta, pero no es antieuropeísta”, mientras que para Podemos, “que tampoco es muy europeísta, la UE nunca ha sido un enemigo como lo ha sido la casta, el Ibex 35 o el palco del Bernabéu”.

De hecho, Molina recuerda que el “estreno político” de Podemos fue precisamente en la UE, con los cinco escaños que lograron en las elecciones de mayo de 2014, uno de ellos inicialmente ocupado por Pablo Iglesias.

De Sumar “aún se sabe poco”, pero Yolanda Díaz ha integrado en su equipo más cercano al eurodiputado de Catalunya en Comú Ernest Urtasun, diplomático europeísta, lo que “da señales de por dónde va”, considera.

Muy revelador también es el hecho de que los nacionalistas catalanes “presumen de ser los más europeístas y su plan era ser independiente y europeos, mientras que el PNV siempre sale con la bandera de la UE”.

En cuanto a PP y PSOE, los dos son europeístas y pertenecen a grupos muy potentes e influyentes en el Parlamento Europeo, aunque practican un europeísmo distinto: PSOE más federalista y basado en reforzar el Estado de bienestar y la política exterior de la unión, mientras que el PP considera la UE el lugar de los valores occidentales, el capitalismo y la relación con Estados Unidos, apunta.

El profesor de Liderazgo Político y experto en la UE de la Universidad Europea Moisés Ruiz coincide en el análisis de Molina y señala que en el Parlamento Europeo Vox está en un grupo “que no es antieuropeo. No es que lleve en vena lo del europeísmo, pero no se le ha escuchado ninguna afirmación antieuropea”.

Mientras, la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, “se ha hecho una mujer de Estado en el Gobierno y ha comprendido que la UE es necesaria, con lo que Sumar nace con un cierto europeísmo”.

Por su parte, los nacionalistas moderados han “integrado” la UE y la utilizan para llevar su programa ideológico en favor de la Europa de las regiones y de los pueblos, siempre desde su propio interés, dice Ruiz.

“Por no decir de (Carles) Puigdemont, al que la UE está salvando económicamente y le sirve de altavoz”, añade.

En cuanto a las posiciones de los partidos en los temas clave de la UE, el politólogo y profesor de la Universidad Pontificia Comillas Javier Martín señala que «la política exterior en general, pero sobre todo la europea, es una política de consenso entre los dos grandes partidos” y “en mayor o menor medida Sumar se ha unido a esa línea de proeuropeísmo y profundización de la integración”.

Así, entre PSOE y Sumar, y PP “hay pequeñas diferencias» en algunas posiciones, como en el Pacto de Migración y Asilo, en el que el PP «tiende a ser más favorable del control de las fronteras, y PSOE y Sumar más favorables a la flexibilización de estas políticas y la compartimentación del reto entre los Estados miembros».

También difieren algo en materia de fiscalidad, en la que PSOE y Sumar defienden la mutualización de la deuda y compartir los riesgos, mientras que PP tiene “ciertas pulsiones hacia el reajuste macroeconómico y la disciplina fiscal”.

Vox, por su parte, es la única fuerza política “si no euroescéptica, sí eurocrítica”, asegura Martín Merchán, quien destaca la “pulsión soberanista y antiglobalista, la pulsión contraria al ‘establishment’ bruselense, sea lo que sea eso, y la política de control fronteriza que defiende Vox”.

En conclusión, como dice Molina, el analista de Elcano, “en las elecciones en España, el tema europeo influye entre cero y nada”.