La Cancha es el lugar de La Navideña donde se mezclan la cultura y el juego, un espacio al aire libre en el que disfrutar y aprender, donde el leitmotiv de este año alcanza su máxima expresión.
Diseñado por Espacio Interrogante y Espacio Carnicería, «La Cancha» cambia el aspecto de Matadero, al tiempo que ofrece una imagen diferente cada día, en función de los juegos elegidos. Basurama es el colectivo que, junto a las 70 Embajadas de los 55 países participantes, se encarga de llenar de contenido el espacio.
Un speaker narra el desarrollo deportivo, explicando las reglas y anécdotas de cada encuentro. Así lo hizo el pasado domingo, momento en que equavóley y fútbol gaélico protagonizaron un partido, símbolo de la pluralidad y unión entre culturas que significa La Navideña.
A los ya celebrados, sóftbol, ultimate frisbee, tejo, jegichagi o criquet bengalí, entre otros muchos, suceden los juegos europeos de Suecia, Suiza y Finlandia, el keniano kati, un encuentro de patinetes, el original bike polo, o el estratega y veloz Roller Derby
