La Virgen de la Estrella de Triana tiene una historia tras de sí que la hace muy especial. Conocida como ‘La Valiente’, la Virgen de la Estrella realiza estación de penitencia el Domingo de Ramos junto al Cristo de las Penas de Triana. Se trata de una imagen atribuida al imaginero Juan Martínez Montañés y, aunque no se conoce con exactitud la fecha de su creación, hay documentos que ya constatan su existencia en el siglo XIX. No obstante, la Hermandad de la Estrella se fundó en 1560. Ahora bien, ¿Por qué a la Estrella de Triana se la conoce como ‘La Valiente’?
La Semana Santa del año 1932 se encontraba sumida en el miedo y la incertidumbre provocados por el delicado rumbo que tomaba la política nacional en el contexto de la II República Española. Aquel año, ante la quema de capillas, conventos, las bajas sufridas en las juntas de hermandades por el terror y el caldeado ambiente de hostilidad que se vivía (como en otras) en la ciudad de Sevilla, se decidió suspender el cortejo de procesiones de las hermandades de Semana Santa. Aquella primavera, todas las cofradías obedecieron lo pactado excepto una: la Hermandad de la Estrella de Triana.
Aquel Jueves Santo de 1932, una multitud de sevillanos y sevillanas se aglomeraban por las calles donde iba a transcurrir la procesión (San Jacinto, Altozano, Puente de Triana, Reyes Católicos, Rioja) deseosos de arte y júbilo. La procesión, que en todo momento transcurría con normalidad, se vio interrumpida a la llegada de la Estrella a la Catedral hispalense. Allí, un joven castellanomanchego disparó a tiros contra la Virgen, cuya talla acabó ilesa, pero originando el revuelo entre la población civil y los agentes de la Benemérita, que capturaron rápidamente al autor de los hechos frente al actual Archivo de Indias.
Tras aquel caótico momento, la Virgen, resguardada en el interior de la Catedral junto a parte de su cortejo, se preparaba para emprender la vuelta hasta Triana. Antes de salir, a oídos de un agente llegó la información de que un grupo de personas se estaban preparando junto al Puente de Triana para cometer un atentado. El cuerpo de la Benemérita, consiguió atrapar en su totalidad a quienes esperaban la procesión para cometer la atrocidad, de modo que la Estrella pudo volver hasta Triana entre aplausos y vítores. El suceso acabó trasladándose a las páginas de muchos periódicos.
Tras aquello, el atentado contra la ‘La Valiente’ hizo historia; una historia que va más allá de lo cofrade o de lo religioso. La valentía de la Estrella forma parte de la historia de España.
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