Madrid, 15 mar (EFE).- El proyecto de ley animal del que se han excluido a los perros de caza y cuyo texto endurece las sanciones a los maltratadores concluirá mañana su tramitación tras debatirse por última vez en el pleno del Congreso para su ratificación final, quedando listo para su publicación en el Boletín Oficial del Estado (BOE) y su entrada en vigor.
En la sesión plenaria de mañana, jueves, se votarán las enmiendas parciales incorporadas en el Senado a dicha iniciativa para la protección de los animales domésticos y silvestres en cautividad, que se tramita en paralelo al proyecto de ley de reforma del Código Penal sobre maltrato animal, asimismo pendiente de ser ratificado mañana por el pleno del Congreso.
El pleno decidirá mañana sobre casi una veintena de enmiendas presentadas en el último trámite en el Senado al primero de esos proyectos de ley, por parte del grupo socialista y asimismo por Más Madrid, Compromis, Junts per Catalunya, ERC-EH Bildu y PNV.
Aquellas que obtengan la mayoría simple de la Cámara quedarán incorporadas al texto definitivo de la ley que estaría lista para su publicación en el BOE y su entrada en vigor, transcurridos seis meses.
Por otra parte, en relación con el otro proyecto de ley, para la reforma del Código Penal sobre maltrato animal, se han presentado una decena de enmiendas por los mismos grupos, salvo el PSOE, que también serán vistas y votadas mañana en el pleno del Senado.
En este caso y dado su carácter orgánico, la iniciativa requiere el apoyo de la mayoría absoluta de la Cámara, 176 votos, en una votación final de conjunto. En caso de alcanzarla, concluiría su tramitación parlamentaria y quedaría lista para su publicación en el BOE y su entrada en vigor.
Las enmiendas incorporadas en el Senado a dicho proyecto de ley de reforma del Código Penal están dirigidas todas ellas a modificar aspectos del texto para evitar que los animales víctimas de maltrato puedan regresar a manos de quienes les infligieron daños una vez que estos hayan cumplido sus condenas.
En cuanto a las enmiendas aprobadas en el último trámite del Senado al otro proyecto de ley, al de bienestar animal, hay varias del grupo socialista, la mayoría de redacción y mejoras técnicas.
Una de ellas, dirigida a quienes tengan alguna especie en casa que cumpla criterios de peligrosidad o precaución para la conservación de fauna silvestre amenazada, obliga a informar de ello a las autoridades en un plazo máximo de seis meses desde la entrada en vigor de esta ley.
Además, hasta la aprobación del listado positivo de especies permitidas, las autoridades competentes habrán de adoptar las medidas necesarias para la intervención y puesta a disposición de los ejemplares en centros de protección de animales silvestres, zoológicos o entidades de protección animal, según el texto de la misma.
Por otra parte, Más Madrid y Junts per Çatalunya, en sus enmiendas incorporadas en el Senado, instan a modificar el texto del proyecto de ley para evitar que las personas sin hogar puedan ser objeto de sanciones discrecionales por vivir con animales en la calle.
«En consecuencia se suprime la prohibición de ejercer la mendicidad valiéndose de animales de compañía o silvestres en cautividad y se añade un inciso que excepciona expresamente el derecho de las personas sin hogar a ir acompañadas de sus animales de compañía».
La formación catalana plantea además mejoras frente a invasiones competenciales y que se modifique el artículo de la norma en el que se habla de «gatos asilvestrados», porque estos dejarán de serlo con las medidas de control fijadas para las colonias felinas y para evitar contradicciones regulatorias.
EH Bildu propone cambiar la disposición final octava porque considera poco realista decir que las medidas de esta ley no supondrán gasto publico ni dotaciones añadidas, dado que se requerirá mas personal y medios materiales para cumplirla.
Desde el PNV se plantean en sus enmiendas varias modificaciones por «invasión competencial» y la supresión de dos apartados del artículo 23 sobre obligaciones de los centros públicos de protección animal por considerarlos muy exigentes y «onerosos para los ayuntamientos».
Esta polémica normativa desde el inicio de su tramitación, ha sido impulsada por la ministra de Derechos Sociales, Ione Belarra, de Podemos, que ha dicho de ella que es «pionera» y marca el inicio de un nuevo camino para acabar con «la impunidad de los maltratadores» en este país.
El proyecto de ley deja fuera del texto a los perros de caza, a los de pastoreo, deporte o policía, entre otros; incluye un listado positivo de animales de compañía permitidos en los hogares, endurece las sanciones hasta 200.000 euros según la gravedad de la infracción y prohíbe la venta y exhibición de perros en las tiendas de mascotas, entre otras novedades.
Exigirá cursos a dueños y mascotas y obligará a tener a los animales identificados; prohibirá utilizar los animales en peleas y mantener de forma habitual a perros y gatos en terrazas, balcones, trasteros, patios o vehículos y dejar sin supervisión a toda mascota más de tres días consecutivos; no más de 24 horas seguidas en el caso de la especie canina. EFE
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