Madrid, 20 sep (EFE).- Una atmósfera inestable con lluvias y fuertes chubascos tormentosos, más abundantes en el sur, centro, este peninsular y las Baleares, se instalará en casi todo el país los próximos días, aunque no paliará al completo la situación de sequía meteorológica actual.
Las mayores acumulaciones se producirán en puntos de los Pirineos, Cataluña y Comunidad Valenciana, con más de 50 litros por metro cuadrado desde este martes hasta el próximo domingo, ha avanzado Rubén Del Campo, portavoz de la Aemet, para detallar que en la mayor parte del norte, salvo Galicia y mitad oriental, podrían acumularse entre 15 y 30 litros por metro cuadrado en los mismos días.
Dichas cantidades son beneficiosas y «ayudarán a paliar en parte, pero, no por completo, la situación de sequía meteorológica en este año hidrológico tan seco a punto de terminar», ha hecho hincapié el portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet).
Este martes se prevén chubascos fuertes en el sur de Extremadura y norte de Andalucía y en Castilla-La Mancha, con temperaturas que «aún no variarán demasiado» y que en ciertas áreas serán todavía calurosas para la época del año.
El miércoles el paso de un área de bajas presiones provocará un aumento de la inestabilidad, más notorio en el centro, sur y este de la península, con chubascos tormentosos localmente fuertes que podrán ir acompañados de rachas intensas de viento y de granizo, que por la noche llegarán al litoral Mediterráneo peninsular y a Baleares.
Este día las temperaturas iniciarán un claro descenso en la mitad sur de la península, aunque en general, las temperaturas serán propias de esta época del año, incluso algo más altas de lo habitual en el noroeste, donde, por ejemplo, Ourense podría rondar los 32 grados de máxima.
El jueves hay que «prestar atención» al área mediterránea, sobre todo a la Comunidad Valenciana, Región de Murcia y las Baleares, ha alertado Del Campo, quien ha señalado que los chubascos podrán ser localmente fuertes, especialmente en el entorno del Golfo de Valencia y también en el oeste de las Islas Baleares.
En el resto del país, se espera algún intervalo nuboso, pero sin lluvias y con valores que bajarán en el área mediterránea peninsular y en las Baleares, pero subirán en el Cantábrico y en Andalucía; en la mayor parte del país las máximas oscilaran entre 24 y 28 grados, aunque en el Valle del Guadalquivir y en el sur de Galicia se podrán superar los 30 o 32 grados.
El viernes, comienzo del otoño astronómico, un frente Atlántico cruzará el país de noroeste a sureste con lluvias débiles en el Cantábrico y tormentas en la mitad norte, especialmente en zonas en puntos de Navarra, La Rioja y Norte de Aragón; en el Mediterráneo se reactivarán los chubascos, alcanzando al archipiélago balear.
Durante el fin de semana, el avance de ese frente hacia el este dará lugar a lluvias generalizadas en la península, que el sábado y el domingo serán más abundantes en el Cantábrico y nordeste, sobre todo Aragón, Cataluña, Baleares y norte de la Comunidad Valenciana.
Las temperaturas bajarán durante el fin de semana «notablemente», y, sobre todo el domingo, soplarán vientos del norte lo que incrementará la sensación desapacible con máximas que en las Comunidades Cantábricas y en la meseta norte no alcanzarán los 20 grados, en la zona centro y nordeste por debajo de los 25 grados y tan solo se superan los 28 grados en Andalucía y Baleares.
