Madrid, 13 mar (EFE).- La industria de la música grabada en España aumentó en un 12,46 % sus ingresos respecto a 2021, hasta alcanzar los 462 millones de euros, con lo que mantiene la tendencia ininterrumpida al alza emprendida en 2014 gracias sobre todo al empuje del «streaming» de audio, que representó casi el 60% del total.
Según ha informado este lunes Promusicae, la entidad que agrupa al grueso del mercado discográfico nacional en volumen de negocio, de los 402 millones que generaron las ventas de música en su conjunto el pasado año (sin los derechos de propiedad intelectual), el 86% de las mismas (345 millones) llegó del sector digital.
El «streaming», es decir, la modalidad de escucha en línea sin descarga, volvió a ser el responsable de casi toda ese porcentaje con 340 millones de euros, especialmente las plataformas de audio, que con 280 millones aumentaron sus ingresos para la industria en un 13 %, en parte a su vez por el crecimiento de las suscripciones de pago, que ya se sitúan en 5,2 millones (un 18 % más respecto a 2021).
También aumentó el volumen de ingresos de las plataformas de vídeo con 60 millones de euros, lo que representa un 16% más que el año anterior, al que hay que sumar los 5 millones de euros derivados de descargas permanentes de música y venta de productos para móvil, estos en una tendencia sostenida a la baja.
El mercado físico no remonta tampoco sus cifras y en 2022 obtuvo unas ventas de 56 millones de euros, similares a las del año de 2020 en pleno estallido de la pandemia de covid-19 con el cierre durante meses de los comercios.
La noticia positiva en este ámbito la pone el formato del vinilo, que se ha convertido en su gran bastión. Con un 15 % más de ingresos y 29 millones de euros, ha superado al CD en importancia estratégica por su mayor margen de beneficio pese a venderse en términos absolutos menos unidades (1,7 millones de vinilos frente a 2,6 millones de CD).
La recuperación paulatina de la hostelería y el ocio nocturno tras los ejercicios marcados por las restricciones pandémicas posibilitaron asimismo un mayor volumen en concepto de derechos de propiedad intelectual, 56 millones de euros, que es casi el doble respecto a 2021 (un 42 % más).
Antonio Guisasola, presidente de Promusicae, ha valorado de forma positiva estas cifras que acercan los registros a 2006, si bien ha solicitado mayor «complicidad pública» con mecanismos como el bono cultural y otros de carácter fiscal para, como en países como Reino Unido o Italia, incentivar la música española fuera de sus fronteras en un momento de «extraordinaria competencia» de la producción de habla hispana en el ámbito global.