Madrid, 7 feb (EFE).- La calificación que dan los españoles al funcionamiento del sistema sanitario público no se recupera a los tiempos prepandemia y mantiene una puntuación de 6,27 sobre 10, prácticamente igual que un año antes (6,26) y casi medio punto por debajo de 2019, cuando la nota otorgada era de 6,74 puntos.
Así figura en el barómetro sanitario de 2023 del Ministerio de Sanidad elaborado por el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) que también revela que los problemas en las listas de espera hospitalaria «siguen igual» para el 43,5% de los encuestados mientras que un 33,9% percibe que han «empeorado» en los últimos doce meses y solo un 11,3% considera que han ido a mejor.
En vísperas de que el Consejo Interterritorial reúna a las autonomías en un foro monográfico sobre la saturación de la Atención Primaria, el barómetro, elaborado entre febrero y octubre del año pasado, también pregunta sobre este nivel asistencial: En este caso, el 81,4 de los pacientes valoran como «buena» o «muy buena» la atención recibida por parte de sus médicos de familia.
Sin embargo son las urgencias del 112 y 061 y los ingresos y la asistencia en los hospitales públicos los servicios sanitarios mejor puntuados por los españoles, con un notable en ambos casos: 7,42 en el primero y 7,23, el segundo.
Cuando se trata de poner nota a la Atención Primaria, los encuestados le dan un 6,37 en el caso de las consultas con los médicos de familia, y un 6,35 cuando se trata de los servicios de urgencias de estos centros. Un poquito más bajo valoran las consultas de atención especializada, que reciben un 6,04.
Un 57% ve necesario «algunos cambios» en el sistema
Según el barómetro, el 56,7% de la población española opina que el sistema sanitario, en general, funciona «bastante bien o bien, aunque son necesarios algunos cambios».
En 2019, antes de la pandemia, el porcentaje que pensaba esto era del 71,4%, cayendo 13 puntos hasta el 57,1% en el año 2022.
Los que opinan que el sistema funciona mal y necesita «cambios profundos» se mantiene estable, con un 14,3% en 2023, frente al 14,5% del año previo.
En esta edición, el barómetro también pregunta a los ciudadanos cómo les está afectando la situación de los centros de Atención Primaria: el 53% afirma que no les afecta «nada o casi nada», un 22% se decanta por «algo» y un 22% dice que «mucho o bastante».
Respecto a qué medidas adoptar, la mayoría apunta a mantener de manera estable el mismo médico de familia, aumentar las plantillas y dedicar más recursos económicos. Otros asuntos se refieren a un mayor tiempo de consulta, mejores instalaciones y medios tecnológicos.
El barómetro constata que en 2023, tres cuartas partes de la población de más de 18 ha acudido alguna vez en el último año a un servicio de Atención Primaria.
Para el 78,6% de ellos fue una consulta presencial, frente al 66,9% de 2022, incremento relacionado con un descenso de las consultas telefónicas, del 31,3% al 19,9%.
El 21,1% de los pacientes fueron atendidos en el mismo día o al siguiente. El 69,8% asegura que esperó más de un día porque no había cita y un 5,3% confiesa que pasó más de un día porque le interesaba otra fecha.
Quienes esperaron más de un día porque no había cita disponible, tuvieron una demora media de 9 días para ser vistos.
Enfermeras, más valoradas que los médicos
Los aspectos más valorados son la confianza y la seguridad que transmite el personal de enfermería (8 puntos) y medicina (7 puntos), seguido del conocimiento de sus problemas de salud y la información recibida (7,5 puntos), y el tiempo dedicado (6,8).
La atención especializada también es valorada por el 82% de los pacientes. Un 42,2% acudió a estas consultas por indicación del médico de familia y un 55,4% por citación del propio especialista tras una consulta anterior.
El 38,2% de las personas remitidas desde Atención Primaria refirieron tiempos de espera de más de tres meses, situación prácticamente igual que un año antes.
El barómetro también se interesa por los hospitales, y el 89,6% de los encuestados que estuvieron ingresados traslada un mensaje positivo respecto a la atención recibida. La enfermería con 8,5 puntos gana a la medicina, 8,4.
Para la mitad de los pacientes el tiempo de espera fue entre 1 y 4 horas; para un 26%, inferior a una hora, mientras que un 2,4% permaneció 24 horas o más.
El 63% desconoce que médicos de otra región pueden ver su historia
Como en años anteriores, el barómetro revela una clara preferencia de la población por los centros públicos tanto en Atención Primaria (70%), especializada (57,2%), hospitalización (75,8%) y urgencias (72,5%9.
No obstante, desde 2015 se detecta un aumento de los seguros privados. Un 21,5% dispone de seguro médico privado contratado de manera individual y un 9,4% por su empresa.
Sobre los servicios de historia clínica y receta digital, llama la atención que un 63% desconoce que los médicos de otra comunidad pueden consultar electrónicamente sus informes clínicos si tuviera que prestarle asistencia y que los informes son interoperables en el conjunto del Sistema Nacional de Salud.