Rafael Martínez
Madrid, 14 nov (EFE).- Los vocales conservadores del CGPJ defienden que no habrá nombramientos para renovar el Constitucional hasta que el Tribunal Supremo resuelva si suspende la designación de Rafael Mozo como presidente del Consejo General del Poder Judicial.
Fuentes del bloque conservador explican a EFE que los nombramientos están condicionados a la decisión que adopte la Sala de lo Contencioso Administrativo sobre la medida cautelar propuesta por el vocal Wenceslao Olea y el secretario general del CGPJ, José Luis de Benito, en sendos recursos contra el nombramiento de Mozo.
«Hasta que no se resuelva la cautelar, no habrá nombramientos», aseguran las fuentes, que destacan que existe un consenso mayoritario entre los ocho vocales para esperar al fallo del Supremo.
Esto es así porque entienden que, si nombran antes de que el Supremo resuelva la cautelar y, después, se diera el caso de que el alto tribunal suspendiera el nombramiento de Mozo, entonces todos los acuerdos adoptados desde su elección serían nulos, incluidos los nombramientos de los dos magistrados del Constitucional.
De esta forma, no se esperan grandes avances en la reunión entre progresistas y conservadores de este miércoles para renovar el TC, si bien los conservadores ya tienen una lista de cinco candidatos, tras justificar en los últimos dos meses que no podía haber nombramientos porque no encontraban aspirantes en el Supremo que quisieran postularse para el tribunal de garantías.
LLARENA, EL FAVORITO ENTRE LOS CONSERVADORES
Y ahora, casi dos meses después de que se cumpliera el plazo legal para realizar los nombramientos, disponen de una lista de cinco magistrados: el presidente de la Sala de lo Contencioso-Administrativo, César Tolosa; el magistrado de esta misma Sala Dimitry Berberoff y los magistrados de la Sala de lo Penal Vicente Magro, Julián Sánchez Melgar y Pablo Llarena, quien apunta a ser el favorito en las quinielas de los conservadores.
Las fuentes destacan que todos son excelentes magistrados, si bien Llarena genera un mayor consenso, especialmente tras conocer de su disposición y de su interés por ser nombrado para el TC.
No obstante, las fuentes precisan que no harán como los progresistas, que ya les han dado cuenta formalmente de que su candidato es José Manuel Bandrés, para no desgastar a su aspirante mientras se espera la decisión del Supremo.
EL FALLO DEL SUPREMO A FINALES DE MES
Un fallo que previsiblemente llegará a finales de mes, puesto que este lunes vence el plazo para que la Abogacía del Estado se pronuncie sobre la cautelar y normalmente la Sala requiere de unos días para estudiar la cuestión. Además, esta sección se suele reunir a mitad y finales de mes, por lo que es previsible que esperen a finales de noviembre.
De esta forma, los conservadores ven difícil que se pueda nombrar a los magistrados en el pleno ordinario del próximo día 24, porque no creen que el alto tribunal resuelva antes la cautelar.
Así, apuntan a los nombramientos inmediatamente después del puente de la Constitución, si bien los tiempos los marcará el fallo del Supremo y, si se adelanta, siempre se puede convocar un pleno extraordinario, que es la posición que manejan los progresistas.
LOS PROGRESISTAS QUIEREN NOMBRAR EN EL PLENO DEL 24
Desde el sector progresista, consideran, sin embargo, que hay que nombrar ya, como tarde en el pleno del 24, pero son conscientes de que no pueden hacerlo sin acuerdo con los conservadores, por lo que todo queda condicionado nuevamente por estos últimos.
Para nombrar a los dos magistrados se precisa un mínimo de 11 votos, lo que requiere el pacto entre conservadores y progresistas, que cuentan con ocho vocales por cada bloque, si bien luego están los moderados Vicente Guilarte y Wenceslao Olea que completan los 18 vocales actuales.
«No vamos a vetar a nadie», señalan las fuentes sobre Bandrés, que recuerdan que las partes acordaron que no habría vetos porque son magistrados del más alto tribunal del país, por lo que a todos se les presupone una excelente hoja de servicios.
Y EL GOBIERNO SIGUE ESPERANDO AL CGPJ
Por otra parte, el Gobierno sigue esperando al CGPJ para nombrar también a sus dos magistrados y completar el tercio que corresponde renovar ahora, si bien el escenario ha cambiado tras la ruptura de las negociaciones para renovar el CGPJ y la reforma exprés de Pedro Sánchez del pasado julio, que devuelve al Consejo las competencias para los nombramientos del tribunal de garantías.
Desde el Constitucional, hay voces que entienden que el Ejecutivo nombrara ya a sus magistrados, ante las dilaciones del sector conservador del CGPJ que no cumplió con el plazo legal.
Tanto es así, que las fuentes aseguran que, en caso de que el Gobierno se adelantara, ahora sería más difícil que el Constitucional se negara a dar el plácet a los dos candidatos, si bien desde el Ejecutivo insisten en esperar al Consejo.