Pekín, 26 sep (EFE).- El vicepresidente de la Comisión Europea (CE), Valdis Dombrovskis, destacó hoy en Pekín la importancia de una investigación en profundidad para garantizar un comercio con China “justo” y “sin distorsiones” en el sector de los vehículos eléctricos (VE).
En una conferencia de prensa al término de su visita de cuatro días al gigante asiático, Dombrovskis hizo hincapié en la necesidad de abordar las subvenciones chinas a la producción de estos vehículos, un asunto que el representante europeo planteó en varias reuniones con funcionarios chinos.
Entre ellos figuró el vice primer ministro chino He Lifeng, quien copresidió con el comisario europeo el décimo diálogo de alto nivel económico y comercial UE-China.
La investigación, destacó Dombrovskis, se centrará en los subsidios a la producción de vehículos eléctricos en China, con la intención de garantizar que cumplan con las regulaciones de la Organización Mundial del Comercio (OMC) y las normativas de la Unión Europea (UE).
El vicepresidente de la CE también subrayó que el bloque comunitario está comprometido con la promoción de la electromovilidad y está otorgando subvenciones a la demanda para la compra de vehículos eléctricos.
Sin embargo, a diferencia de las que concede China según la UE, estas ayudas “están disponibles para todos los fabricantes”, independientemente de su origen, y no están vinculadas a requisitos de contenido local o ensamblaje local.
Dombrovskis señaló que el rápido crecimiento de la cuota de mercado de vehículos eléctricos de marca china en la UE, que ha aumentado del 1 % al 8 %, plantea un “riesgo de daño a la industria europea”.
A su vez, ante el planteamiento de proporcionar subvenciones del lado del consumidor solo a vehículos eléctricos producidos en Europa, con la posibilidad de localizar fábricas de automotrices chinas en el viejo continente, Dombrovskis enfatizó que esto podría ser cuestionable desde el punto de vista de la OMC y los acuerdos comerciales bilaterales.
Además, mencionó que las subvenciones vinculadas al contenido local y al ensamblaje local “han suscitado preocupaciones” con los Estados Unidos y que la UE no planea seguir este enfoque.
Hace dos semanas, la presidenta de la CE, Ursula von der Leyen, anunció la apertura de una investigación sobre los subsidios que China concede a sus vehículos eléctricos, cuyos precios son «artificialmente bajos» por estas ayudas públicas y suponen pérdidas para las compañías europeas.
China manifestó entonces su «gran preocupación y fuerte descontento» por el anuncio de la UE y acusó a Bruselas de practicar un «proteccionismo descarado».
Esta misma semana, cifras de la patronal china del sector automotriz mostraron que las exportaciones de eléctricos producidos en el país asiático hacia el resto del mundo fueron más del doble (+110 %) en los primeros ocho meses de este año que en el mismo período de 2022, alcanzando unos 727.000 vehículos hasta agosto.