Belgrado, 31 mar (EFE).- El economista europeísta Jakov Milatovic tenía sólo siete años cuando llegó al poder por primera vez su rival en las elecciones presidenciales en Montenegro de este domingo, el histórico dirigente y candidato a la reelección Milo Djukanovic.
Esa diferencia generacional dice mucho del duelo de este domingo y explica por qué el aspirante se refiere a su contrincante como «hombre del pasado» e incluso como «el último dictador europeo», en relación a los 30 años que Djukanovic lleva dominando, bien como primer ministro o bien como presidente, la política de Montenegro.
Milatovic, de 37 años, lleva en política sólo desde el 2020, cuando fue nombrado ministro de Economía en el primer Gobierno en tres décadas en el que no estaba el Partido Democrático de los Socialistas (DPS), de Djukanovic.
Promueve un discurso moderado y quiere romper la polarización entre prorrusos y europeístas que divide al país, y también promete reformas económicas que mejoren el nivel de vida de los ciudadanos y lleven al país a la Unión Europea, y que acaben con la imagen de un «Montenegro pauperizado y con las instituciones cautivas» por Djukanovic.
Su plan de asumir la Alcaldía de Podgorica, la capital del país, se alteró después de la Comisión Electoral rechazara la candidatura a la Presidencia de Milojko Spajic, su compañero en el partido ¡Europa Ahora! (ES), obligándole a asumir él ese reto.
Después de terminar los estudios de Economía en la Universidad de Podgorica como el mejor estudiante de su promoción, hizo un máster en la Universidad de Oxford y se especializó en diferentes academias europeas y de Estados Unidos.
Ha trabajado en como analista y economista en instituciones como el Banco Europeo de Reconstrucción y Desarrollo (BERD).
«Con mis conocimientos, formación y contactos internacionales puedo representar dignamente a mi país. He vivido en seis Estados occidentales, lo que es una experiencia que se puede emplear de la mejor manera por el interés público de Montenegro», ha afirmado sobre esa carrera en el extranjero.
Regresó a Montenegro para ser ministro de Economía, entre diciembre de 2020 y abril de 2022, en un Ejecutivo apoyado por una heterogénea coalición de europeístas y prorrusos y de personas próximas a la Iglesia ortodoxa serbia.
Junto con Spajic, entonces ministro de Finanzas, impulsó el aumento del sueldo mínimo de 250 euros a 450, y el salario medio de 500 a 700, algo que le ha dado mucha popularidad.
De hecho, asegura que es posible llegar a un sueldo medio de 1.000 euros en poco tiempo.
Sus adversarios le acusan de populismo y de crear ilusiones infundadas sobre rápidas mejoras económicas.
Milatovic está casado y tiene dos hijos.