Nairobi, 21 dic (EFE).- El presidente de Francia, Emmanuel Macron, reafirmó este sábado la importancia estratégica de Yibuti, un pequeño país del Cuerno de África que acoge la última base militar operativa francesa en el continente, tras la retirada de fuerzas galas de otras naciones africanas en los últimos años.
«Esta asociación con Yibuti, en el corazón de una de las regiones más estratégicas del mundo, entre el Cuerno de África, Oriente Medio y Asia, responde de hecho a intereses estratégicos compartidos», afirmó Macron tras reunirse con el presidente yibutí, Ismaïl Omar Guelleh, en la capital homónima del país africano.
«El pasado mes de julio firmamos un nuevo tratado de cooperación en materia de defensa por un período de veinte años, lo que demuestra esta confianza mutua entre nuestros dos países y la convergencia de nuestros intereses estratégicos», subrayó el mandatario galo en una comparecencia conjunta.
El jefe de Estado francés recordó que la «integridad territorial» y la «estabilidad» de Yibuti forman «parte de este tratado», que también busca «preservar la estabilidad regional y luchar contra los movimientos terroristas», así como «garantizar la libertad de navegación en las rutas marítimas, vital para el comercio global».
«Por tanto, aquí el carácter estratégico es claro y esta cooperación está irrigada por la confianza, el vínculo y la mejora de este vínculo entre nuestros ejércitos», aseveró Macron, que la pasada noche celebró una cena navideña con los 1.500 soldados que el país europeo tiene desplegados en Yibuti.
El mandatario francés afirmó ante los militares que la base yibutí se convertirá en «un punto de proyección para algunas de nuestras misiones africanas» porque el «papel» de Francia «está cambiando en África».
Además, Macron abordó con su homólogo yibutí la situación regional y aplaudió «el proceso de diálogo que ha avanzado de manera decisiva entre Etiopía y Somalia» para acabar con la crisis diplomática que viven esos dos países vecinos de comienzos de año.
«También coincidimos en la importancia de implementar un proceso de diálogo para poner fin al terrible conflicto en Sudán. Y ya saben el compromiso de Francia en esta área y también la importancia de mantener el apoyo a los esfuerzos africanos para estabilizar Somalia», agregó.
Por su parte, Guelleh, en el poder desde 1999, enfatizó el «profundo compromiso» de su país con «la preservación y promoción de esta asociación estratégica que nos une a Francia».
Entre 2022 y 2023, las fuerzas francesas fueron expulsadas de Mali, Burkina Faso y Níger.
Recientemente, Chad y Senegal han expresado también su rechazo a al presencia militar francesa, que a su vez se está reduciendo al mínimo en Gabón y Costa de Marfil.
De ahí la renovada importancia que ha adquirido la base francesa de Yibuti, un importante socio geoestratégico por su ubicación, entre el mar Rojo y el golfo del Adén.
El país es clave para controlar la seguridad de una de las rutas más comerciales más transitadas del mundo, en el acceso al mar Rojo desde el océano Índico, y en el cruce de caminos entre África y la península arábiga, a poca distancia de Yemen.
Por eso, otros países como Estados Unidos, China o Japón también tiene allí bases militares.
Macron llegó a Yibuti la pasada noche tras visitar en el océano Índico el archipiélago francés de Mayotte, devastado por el paso del ciclón Chido.
Tras un almuerzo de trabajo con Guelleh, el presidente francés viajará a la vecina Etiopía para reunirse este sábado con el primer ministro etíope, Abiy Ahmed.