Málaga se moviliza con una campaña para el uso responsable del agua

Presentación de la campaña para el uso responsable del agua.

Nueva estrategia innovadora para promover el cuidado del agua ante la sequía

En un esfuerzo por concienciar sobre la importancia del uso responsable del agua, el Ayuntamiento de Málaga, a través de su Empresa Municipal de Aguas (Emasa), ha lanzado una campaña que se destaca por su enfoque creativo y cercano. Bajo el lema «Tenemos que hablar», esta iniciativa busca resaltar la relación vital que compartimos con el agua, empleando metáforas de relaciones de pareja para transmitir su mensaje de una manera que resuene emocionalmente con la ciudadanía.

Ante la severa escasez y la declaración de sequía excepcional en el Sistema Guadalhorce-Limonero, causada por la prolongada ausencia de lluvias, la campaña emerge como una parte crucial de un conjunto más amplio de estrategias del Consistorio para fomentar el ahorro de agua y la exploración de fuentes alternativas de suministro, como el mayor aprovechamiento de pozos del Bajo Guadalhorce y la promoción del uso de aguas regeneradas.

Presentada por la concejala de Sostenibilidad Medioambiental, Penélope Gómez, la campaña arrancó simbólicamente el Día de los Enamorados, utilizando espacios publicitarios urbanos para lanzar mensajes provocativos que inicialmente dejaban al público adivinando quién era el emisor. Ahora, en su segunda fase, se revela que es el agua misma quien «habla», instando a la reflexión y acción directa sobre la gestión del recurso hídrico.

La campaña, diseñada por el estudio creativo La Madre de los Beatles, se extenderá hasta el 22 de marzo, Día Mundial del Agua, incluyendo publicidad en prensa local, radios, televisiones, y redes sociales, además de continuar con la presencia en espacios de publicidad exterior. Se culminará con un expositor informativo que ofrecerá herramientas prácticas para el ahorro de agua, integrando a la comunidad en la gestión consciente del recurso.

Esta iniciativa no solo evidencia el compromiso del Ayuntamiento y Emasa con la sensibilización ciudadana frente a la crisis hídrica, sino que también destaca por su aproximación original y accesible, enfatizando que la responsabilidad del cuidado del agua es un asunto de todos. Con una inversión de cien mil euros, la campaña «Tenemos que hablar» se convierte en un llamado a la acción para cuidar de este recurso escaso y vital, incentivando a la población a adoptar hábitos más sostenibles en su día a día.