Más de 900 migrantes llegan a Italia, mientras mil esperan en el Mediterráneo

El barco Geo Barents, de la ONG Médicos sin Fronteras, en una foto de archivo en el puerto de Siracusa (Italia). EFE/EPA/CARMELO IMBESI

Roma, 3 nov (EFE).- Más de novecientos migrantes han llegado a las costas italianas en las últimas horas, mientras aproximadamente otros mil esperan desde hace días en tres barcos de organizaciones humanitarias salvados en el Mediterráneo Central y Alemania ha pedido a Italia que preste ayuda rápidamente a una de las naves, de pabellón germano.

Un total de 456 personas, entre ellas 40 niños y 25 mujeres, desembarcaron esta madrugada en el puerto de Crotone (sur), al que llegaron a bordo de un gran barco pesquero interceptado por la Guardia di Finanza a 15 millas de la costa y que había salido de Libia hace ocho días.

La mayoría eran egipcios, pero también había muchas familias sirias, que han sido trasladadas al centro de acogida de la isla Capo Rizzuto, que se encuentra muy por encima de su capacidad, con más de 1.500 alojados cuando su máximo son 640 plazas y la Defensa Civil ha tenido que levantar un centenar de tiendas de campaña para alojar a los refugiados.

Lo mismo sucede en Lampedusa, la pequeña isla meridional italiana, donde continúan los desembarcos y cuyas instalaciones para albergar a quienes llegan en las naves están superpobladas: 1.800 personas ocupan un lugar con una capacidad máxima para 350, según los medios locales.

Esta noche llegaron tres embarcaciones con 121 migrantes a bordo, entre ellos 28 mujeres y 10 menores, que se suman a los 12 que se registraron el miércoles, con 385 personas, llegadas desde Camerún, Costa de Marfil, Guinea, Malí, Senegal, Gambia y Burkina Faso.

Además, tres barcos de organizaciones humanitarias con 985 inmigrantes a bordo salvados en el Mediterráneo central esperan desde hace días la asignación de un puerto y reclaman un puerto seguro en el que poner a salvo a estas personas.

La nave de la ONG Médicos Sin Fronteras, Geo Barents, lleva varios días esperando puerto con 572 inmigrantes, mientras la Ocean Viking, de la organización SOS Méditerranée y bandera noruega, que actúa en el Mediterráneo en colaboración con la Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja (FICR), viaja con 234 personas.

Y el barco Humanity One, de la ONG SOS Humanity y bandera alemana, lleva 179 inmigrantes, entre estos un bebe de siete meses y más de 100 menores no acompañados.

Precisamente sobre este barco ha surgido un contencioso italo-alemán en las últimas horas, después de que medios italianos revelasen que Alemania había pedido a Italia, tras anunciar ésta que estudiaba el cierre de sus puertos a las ONG extranjeras, que ayudase urgentemente a los refugiados rescatados por la nave.

«El Ministerio italiano de Exteriores, de acuerdo con el Ministerio del Interior, informa de que ha enviado una nota oficial por escrito a la Embajada de la República Federal de Alemania solicitando tener un cuadro completo de la situación a bordo del «Humanity 1″ con vistas a tomar cualquier decisión», se indica en un comunicado divulgado anoche.

El nuevo ministro de Interior, Matteo Piantedosi, que fue jefe de gabinete de Salvini cuando él ocupó el mismo cargo, confirmó que se aplicará la ley de seguridad y que por tanto «los estados de bandera (Alemania y Noruega ) son competentes para la asistencia y por lo tanto para la recepción».