Madrid, 16 dic (EFE).- La protesta agraria contra la política comercial de la Unión Europea (UE) ha finalizado sin incidentes destacables y al acto han asistido un millar de productores, según datos de la Delegación del Gobierno (5.000 según los convocantes).
La concentración estaba convocada por las asociaciones profesionales agrarias Asaja y COAG, con el apoyo de Cooperativas Agro-alimentarias y, según los organizadores, marca el inicio de un nuevo calendario de protestas si no se aportan las soluciones oportunas.
Durante el acto, se han explicado los motivos que llevan al sector a rechazar acuerdos de libre comercio como el cerrado recientemente entre la UE y Mercosur, pendiente aún de ratificación.
De hecho, tanto Asaja como COAG han expuesto su tabla reivindicativa, en la que se recogen peticiones como el rechazo al acuerdo UE-Mercosur, la suspensión del pacto de libre comercio UE-Marruecos, y la recuperación del principio de preferencia comunitaria frente a las importaciones «sin control que no cumplen las normas comunitarias».
Además, exigen la imposición de las «cláusulas espejo», es decir, que «todos» los productos que entren de terceros países se equiparen a los estándares de producción de la UE, tanto en lo referente a normativas de bienestar animal como regulaciones de fitosanitarios o normas medioambientales.
Asaja y COAG reclaman al Gobierno central un plan de choque ante el incremento de los costes de producción agrarios; un plan de ayudas para la agricultura continental, «en crisis por los bajos precios y altos costes de producción»; y una reforma de la Política Agrícola Común (PAC) para que tenga una «simplificación real».
La apuesta por una política hidráulica «con inversiones en construcción y modernización de infraestructuras» y la suspensión de la inclusión del lobo en el listado de protección Lespre son otras de las peticiones.