Bangkok, 22 sep (EFE).- «La Grenouillère», «La terraza de Sainte-Adresse», «Impresión, sol naciente» y la icónica serie «Nenúfares» son algunas de las más de 3.000 obras digitalizadas que componen la exposición «Monet & Friends Alive», una experiencia inmersiva que se propone a sumergir a Bangkok en el corazón del impresionismo francés.
A través de una experiencia multisensorial, que combina formas, olores, colores y una vibrante banda sonora, los espectadores podrán recorrer e interactuar a partir de este viernes con los trabajos de Claude Monet y otros 14 artistas impresionistas, como Camille Pisarro, Paul Cézanne, Édouard Manet y Pierre-Auguste Renoir.
La exposición, que abre sus puertas hoy en el centro comercial IconSiam de la capital tailandesa y se extenderá hasta el 7 de enero próximo, reúne 3.500 obras en una experiencia que fusiona arte, tecnología y entretenimiento en un verdadero viaje digital al cautivador mundo del arte impresionista del siglo XIX.
Se trata de «una nueva forma de utilizar las imágenes digitalizadas para mostrar las pinturas reales» al público que, «con el espectáculo inmersivo, durante una hora puede ver 3.500 obras en un gran tamaño, con colores frescos y eso es algo muy atractivo», dijo a EFE Devin Ma, uno de los organizadores de la muestra.
En un espacio de más de 4.000 metros cuadrados, los espectadores son invitados a caminar y descubrir los secretos de Londres y París del siglo XIX, así como visitar los paisajes más bucólicos de la Europa impresionista o desvelar los encantos de La Belle Époque, la época dorada de la capital francesa.
Desde el centro de una sala llena de enormes pantallas, iluminadas por 40 proyectores en las paredes y otros 20 en el suelo, el público transita por los lirios de Monet, las zapatillas de punta de Degas y las sensuales fiestas en barco de Renoir, que cobran vida en tamaños gigantes.
La experiencia visual es potenciada por la sincronizada banda sonora, que rememora los grandes éxitos de la época con varios clásicos como «Danza Rusa» o «Vals de las flores», de Tchaikovsky, y «Claro de luna», de Debussy.
Antes de adentrar en la sala inmersiva, los visitantes pueden conocer la historia del movimiento impresionista francés gracias a los materiales de archivo que complementan la muestra, con textos, paisajes, fotografías de los artistas y carteles de la época.
Asimismo, «Monet & Friends Alive» reúne una serie de escenarios interactivos que emulan los paisajes originales de las pinturas y permiten a los asistentes hacerse fotos o participar en las escenas retratadas en las emblemáticas obras.
Es el caso del cuadro «El puente japonés», de Monet, cuyos elementos, como el propio puente, el jardín, el agua y las flores, se materializan y le ofrecen al público la oportunidad única de inmortalizarse en una instantánea capturada en el medio de sus vibrantes componentes.
«Es un paquete completo, con un espectáculo verdaderamente multisensorial que combina la luz, el sonido, el olor, el vídeo y también ofrece decoraciones que puedes tocar e interactuar», remata Devin.