La mejora del asfaltado ayudará a reactivar el comercio local y las actividades de ocio
Reparar el asfaltado de las calles de Móstoles, no solo es una apuesta por la accesibilidad, sino también una inversión que permitirá mejorar la calidad de vida de los vecinos. Con este objetivo el Gobierno de Móstoles destinará cerca de un millón de euros al nuevo plan de asfaltado que permita dar respuesta a la necesidad de reforma del firme de diversas calles. Entre ellas, la Calle Berlín, la calle Juan Ramón Jiménez, el Paseo de Arroyomolinos, tramo entre la calle Alcalde de Zalamea y Calle Alfonso XII, la calle Río Nervión, la calle del Castaño, la Avenida de la ONU entre Simón Hernández y la calle Veracruz.
El Gobierno local aprueba los pliegos de adjudicación del contrato de asfaltado de Móstoles que permitirá llevar a cabo las obras. Entre las actuaciones se contempla: la demolición y reposición del firme de hormigón en mal estado, la instalación de sumideros en las zonas donde más acumulación de agua de lluvia se produce, tratamiento de las grietas y nivelado de las mismas. Además, se procederá a la señalización horizontal de los viales.
La reforma del asfaltado de las vías supondrá una inyección económica para los empresarios y al empleo local con la contratación de operarios, la compra de materiales, el transporte de los mismos. El Gobierno local pretende también reactivar así la red del comercio local, la hostelería y las actividades de ocio haciendo más accesibles algunas zonas de la ciudad.
En su compromiso por preservar el medioambiente, el Gobierno de Móstoles vuelve a apostar por el uso de asfalto procedente de caucho reciclado. Este tipo de firme ayuda a reducir el consumo energético, las emisiones de gases de efecto invernadero, es más resistente y además reduce el ruido. Este tipo de asfalto se utilizará en la calle Las Palmas, la calle Juan Ramón Jiménez y en la calle Murillo.