Con motivo del Día Mundial de lucha contra el SIDA, que se celebra mañana 1 de diciembre, bajo el lema «Conoce tu estado», el Ayuntamiento de Móstoles, junto a diferentes instituciones y asociaciones, se ha sumado a la campaña mundial de lucha contra esta pandemia, que en 2018 cumple 30 años.
El Pleno de Móstoles ha aprobado este mes una Declaración institucional de todos los grupos políticos con motivo del Día Mundial del SIDA, en la que hace un llamamiento para promover el diagnóstico precoz del VIH como importante medida de salud pública.
Por su parte, la concejala de Igualdad, Sanidad y Mayores, Ana María Rodrigo, ha visitado esta mañana las mesas informativas y puntos de realización de la prueba rápida del VIH instaladas en el Hospital Universitario Rey Juan Carlos y en el Hospital Universitario de Móstoles. Asimismo, ha acudido a la unidad móvil instalada por la Cruz Roja Móstoles-Navalcarnero en la calle Tulipán, donde también se han realizado pruebas rápidas de detección del VIH.
Mucho camino por recorrer
El Día Mundial del Sida nació en la reunión mundial de la cumbre de Ministros de Salud sobre programas de prevención del sida de 1988. Desde entonces, las agencias de las Naciones Unidas, los gobiernos y la sociedad civil se reúnen cada año para luchar en determinadas áreas relacionadas con el sida.
Según la ONU, desde 1988 se han hecho importantes progresos en la respuesta al sida y, a día de hoy, tres de cada cuatro personas que viven con el VIH conocen su estado serológico. No obstante, y tal y como muestra el último informe de ONUSIDA, aún queda mucho camino que recorrer, y dicho camino pasa por llegar a las personas que viven con el VIH y no conocen su estado y por garantizar que tengan acceso a servicios de asistencia y prevención de calidad.
Las pruebas del VIH son esenciales para ampliar el tratamiento y asegurarles a las personas que viven con el VIH la posibilidad de llevar vidas saludables y productivas. También es fundamental alcanzar los objetivos 90-90-90 y empoderar a las personas para que tengan capacidad de decisión en relación a la prevención del VIH, de modo que puedan protegerse a sí mismos y a sus seres queridos.
Desafortunadamente, numerosos obstáculos siguen dificultando las pruebas del VIH: el estigma y la discriminación disuaden a las personas de realizarse las pruebas, el acceso a las pruebas confidenciales sigue siendo problemático y muchas personas siguen realizándoselas únicamente tras haber enfermado y padecer los síntomas.
La buena noticia es que hay muchas formas nuevas de ampliar el acceso a las pruebas del VIH. Las pruebas de autodiagnóstico, las pruebas de enfoque comunitario y las pruebas para el diagnóstico de varias enfermedades están contribuyendo a que las personas conozcan su estado serológico.
Los programas de pruebas del VIH deben ampliarse. Para ello, son necesarias la voluntad política y las inversiones, así como nuevos enfoques para las pruebas del VIH que sean innovadores y hagan que el aprovechamiento y la cobertura sean óptimos.