Barcelona, 8 jun (EFE).- El portavoz de Ciudadanos (Cs) en el Parlament y miembro del Comité Ejecutivo Nacional, Nacho Martín Blanco, ha anunciado este jueves que abandona la formación liberal y ha expresado su «pesimismo» sobre el futuro del partido.
«Me voy de Ciudadanos porque he perdido la esperanza en la capacidad de este partido, en la viabilidad de este partido en lo sucesivo», ha explicado Martín Blanco en una rueda de prensa en el Parlament.
La de Martín Blanco es la primera baja significativa que sufre Ciudadanos en Cataluña tras los malos resultados de las últimas elecciones municipales, en las que obtuvieron 10 concejales en toda la comunidad y se quedaron fuera del Ayuntamiento de Barcelona.
El dirigente dejará todos sus cargos institucionales y orgánicos, así como la militancia, y Cs ya ha anunciado que Anna Grau será la nueva portavoz del grupo parlamentario, mientras que la exdiputada y actual presidenta del Consejo General del partido, Noemí de la Calle, ocupará su escaño.
Preguntado sobre su futuro y la posibilidad de que se integre en el PP, Martín Blanco no se ha pronunciado: «Quiero hablar de lo que puedo hablar con consistencia, con claridad y con firmeza. No quiero hablar ni hacer especulaciones sobre ninguna otra cosa».
Sin embargo, sí que ha dicho que tiene «muy claro» qué votará en las próximas elecciones generales, aunque no lo ha revelado.
«Los resultados de Ciudadanos en las últimas elecciones, tanto en las municipales del 28M como en sucesivos procesos electorales en Andalucía, la Comunidad de Madrid y otras autonomías, han sido resultados ciertamente decepcionantes, que han dejado un espacio político con unos réditos electorales muy reducidos, constreñidos casi a la mínima expresión», ha señalado Martín Blanco.
El dirigente de Cs ha reconocido que los últimos días han sido «muy intensos y tristes» tanto para él como para el conjunto del partido: «He vivido semanas de una gran intensidad emocional, y de una gran convulsión personal y también política».
«No comparto la visión moderadamente optimista que algunos tienen todavía con relación al proyecto de Cs y esto evidentemente pesa en mi ánimo y en esta decisión de forma definitiva», ha señalado.
En este sentido, ha explicado que en la reunión de la dirección del partido en la que se decidió que Cs no se presentara a las próximas elecciones generales no solo defendió que el partido no concurriera a los comicios, sino que puso en duda la viabilidad futura de la formación.
A pesar de reiterar su pesimismo sobre el devenir de Cs, Martín Blanco ha deseado que sus pronósticos no se cumplan: «Espero que Ciudadanos sea un partido viable, que siga teniendo un espacio político en España y en Cataluña».
Asimismo, ha considerado que «las ideas de Ciudadanos siguen vivas y presentes en la sociedad», y ha reivindicado el «servicio espectacular a la democracia en Cataluña y en el conjunto de España» que ha hecho el partido.
Para Martín Blanco, Cs ha sido «absolutamente imprescindible en la lucha contra una de las grandes lacras que tiene el país, que es el nacionalismo identitario que por desgracia anida en Cataluña».