Con la pionera ordenanza de protección de la salubridad pública se pretende garantizar la sanidad ambiental, la higiene y la seguridad alimentaria
Alcorcón ha aprobado la puesta en marcha de una ordenanza de protección de la salubridad pública; el objetivo es garantizar la sanidad ambiental, así como la higiene y la seguridad alimentaria. La ordenanza se aprobó inicialmente en la última sesión plenaria y lo realizó la Corporación Municipal; además, se ha impulsado a través de la Concejalía de Servicios Sociales y Salud Pública.
Candelaria Testa, portavoz del Gobierno Municipal, informaba que «esta ordenanza, pionera y totalmente nueva en la institución, tiene por objetivo establecer las condiciones técnico-sanitarias que por normativa deben reunir diferentes establecimientos». Así, ha querido explicar que la ordenanza se relaciona con establecimientos tanto de elaboración y venta de comidas y bebidas; pero que también con centros infantiles, piscinas, peluquerías, entre otras.
La candidata socialista a la alcaldía afirmaba que «se trata de la primera ordenanza de estas características en nuestra ciudad». La portavoz ha querido explicar que se ha concebido como el «resultado del compromiso del Equipo de Gobierno con las condiciones de salubridad de distintas actividades«. Por todo ello, considera que lo que están realizando con esta ordenanza es «derogar cuestiones y normativas obsoletas». Es más, gracias a ella «se eliminan trabas administrativas»; con las que se podrá «favorecer a una gestión mucho más fácil«; pero también comienza una «normativa de impacto directo» en la salud de las personas. Esto se debe a que la normativa cubre el control de multitud de actividades.