Page: el trasvase Tajo-Segura se fundamentó en «una mentira» y dejó «una herida profunda» en Castilla-La Mancha

EFE/ Ismael Herrero

Toledo, 3 abr (EFE).- El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha asegurado que el trasvase Tajo-Segura se ha fundamentado «en una mentira», en el caudal y en el dinero, y ha añadido que el modelo es «insostenible» y «ha dejado una herida profunda en esta tierra».

García-Page, que ha intervenido en Toledo en el acto de celebración del 45 aniversario del periódico La Voz del Tajo, se ha referido a la reunión del Consejo Nacional del Agua prevista para este jueves y ha dicho que «algunos van más por defender a su partido que a su región».

El presidente regional ha señalado que el trasvase «se fundamentó desde el primer día en una enorme mentira, en un enorme fraude», ya que «se engañó a un banco alemán» y «si hoy tuviéramos que estar amortizando la deuda no salen las cuentas», ha apuntado.

Además, ha dicho que «se engañó porque se calculaba que para que fuera mínimamente viable tenía que contar con tres veces la acumulación de agua que nunca ha llegado a tener. Nunca ha estado ni a un tercio de la capacidad que se decía en los papeles que era necesaria como mínima para que hubiera trasvase». Por tanto, «siempre ha sido un gran engaño», ha reiterado.

García-Page también ha precisado que España se ha gastado más de 600 millones de euros en desaladoras y ha afirmado que si él fuera presidente de una región con salida al mar «estaríamos pidiendo que nos pagaran las desaladoras para poder usarlas y no tener que estar con el agua al cuello».

A su juicio, la «gran pregunta» que hay que hacerse es: «Si todas las desaladoras que hemos pagado entre todos los españoles estuvieran al cien por cien de funcionamiento, ¿cuanta agua sería necesaria trasvasar para abastecer la demanda actual? Cero», ha aseverado.

«Entonces, ¿por qué solo se ponen a funcionar cuando el Tajo lleva poca agua? Por lo de siempre: es más barato, un agua casi regalada», ha continuado el presidente de Castilla-La Mancha, para quien «esto tiene que cambiar».

«No queremos ningún tipo de quiebra económica en ningún sector», pero «esto ya aguanta muy poco. Es un modelo falso, insostenible y que ha dejado una herida profunda en esta tierra», ha sentenciado el presidente.