Redacción Internacional, 25 jun (EFE).- Presidentes y líderes de izquierda han expresado su alegría por la liberación del fundador de WikiLeaks, Julian Assange, tras haber firmado un acuerdo de culpabilidad con el Departamento de Justicia estadounidense.
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, fue uno de los primeros líderes en reaccionar la noticia hecha publica este lunes.
«Celebro la salida de Julian Assange de la cárcel. Cuando menos en este caso, la Estatua de la Libertad no quedó como un símbolo vacío; está viva y contenta como millones en el mundo», apuntó López Obrador en un mensaje en la red social X.
López Obrador se refirió con este mensaje a otro lanzado el pasado mes de febrero cuando sugirió que Estados Unidos trasladara la Estatua de la Libertad a México, donde «sí hay libertad», por el caso del fundador de Wikileaks.
Claudia Sheinbaum, presidenta electa de México y exjefa de gobierno de la capital del país, recordó que el pasado mes de febrero entregó las Llaves de la Ciudad a la familia de Julian Assange.
«Para nosotros Julian representa la verdad, la libertad de expresión. Somos una Ciudad progresista que siempre ha defendido las grandes libertades y el derecho al libre acceso a la información».
«El largo y cruel castigo que le impusieron por sus denuncias de los crímenes imperiales, quedará en la memoria de los pueblos como prueba de cuán poco creen sus carceleros en la libertad de prensa», dijo por su parte en su cuenta de X el presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel Bermúdez.
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, también celebró la liberación de Assange, a quien describió como un «ejemplo de coraje y valentía en la batalla por la verdad».
«En nombre del pueblo de Venezuela, abrazamos y felicitamos a Julian Assange por su liberación. Es el triunfo de la libertad y la lucha de la humanidad por el respeto de los derechos humanos», escribió el jefe de Estado en la red social X.
«Felicito a Julian Assange por su libertad. La prisión eterna de Assange y su tortura era un atentado contra la libertad de prensa a escala global. Denunciar la masacre de civiles en Irak por parte de la acción bélica de EE.UU. fue su crimen, ahora la masacre se repite en Gaza», expresó el presidente colombiano, Gustavo Petro.
En la misma línea se manifestó el expresidente boliviano, Evo Morales: «Nos alegra mucho la libertad de Julian Assange. Estuvo preso muchos años por exponer ante el mundo los crímenes de los Estados Unidos. Nos ayudó a develar y desmantelar las mentiras sobre las que justifican guerras e invasiones. Es un día de alegría para la lucha por la paz», dijo.
Mientras, en Australia, país de origen de Assange, su primer ministro, Anthony Albanese, celebró su puesta en libertad.
«No hay nada que ganar con su encarcelamiento y lo queremos de vuelta en Australia», dijo hoy Albanese, en una sesión de control en el Parlamento de Camberra, al referirse al activista de 52 años.
Y el dirigente laborista británico Jeremy Corbyn, en un escueto mensaje destacó que «Julián Assange está libre. Julián expuso los crímenes de los poderosos. Su encarcelamiento fue, y siempre será, un grotesco error judicial».
«Nunca dejes de luchar por la verdad. Nunca pierdas la esperanza. Nunca te rindas», indicó.
Las reacciones se producen apenas unas hora después de que el portal WikiLeaks anunciara que Assange dejó el lunes la prisión de alta seguridad británica donde estaba recluido y abandonara el Reino Unido con el objetivo de volver a Australia.
«Julian Assange está libre. Dejó la prisión de máxima seguridad de Belmarsh la mañana del 24 de junio, tras haber pasado allí 1.901 días», informó WikiLeaks en su cuenta de X.
Assange comparecerá el miércoles a las 9:00 hora local (23:00 GMT del martes) en un tribunal de las Islas Marianas, un territorio estadounidense en el océano Pacífico, para finalizar el acuerdo judicial alcanzado con el Departamento de Justicia de EE.UU..
La justicia estadounidense había acusado a Assange de hasta 18 delitos por violar la Ley de Espionaje debido a una de las mayores filtraciones de información clasificada en la historia de Estados Unidos en 2010, que reveló secretos de las guerras de Irak y Afganistán, así como datos sobre los detenidos en la base de Guantánamo, entre otros asuntos.