Una raza andaluza conocida por su tranquilidad y excelente relación con los niños, es ideal para familias activas y cariñosas que buscan un compañero fiel y juguetón para sus hijos
Ray, el perro de aguas, se integró a la familia cuando la hija menor llamada Aitana, a los 3 años, temía profundamente a los perros. Optaron por esta raza debido a su naturaleza tranquila y su compatibilidad con alergias, características típicas de los perros de agua originarios de Andalucía. Después de encontrar a Ray con un criador en Sevilla y llevarlo en tren a casa, su presencia marcó una notable transformación: el miedo de Aitana se convirtió en cariño hacia él. Ahora, disfrutan juntos de su compañía constante.
Ray también destaca por su distintivo pelaje rizado, una característica que a menudo define a los perros de agua y les otorga una apariencia única entre otras razas. Su pelo rizado no es lo único que le hace llamativo, sino que también posee una naturaleza activa y juguetona, ganándose la admiración de quienes lo rodean. Más allá de ser una mascota, Ray ha jugado un papel crucial al enseñarle a Aitana sobre responsabilidad y afecto animal, fortaleciendo el lazo especial entre ambos.
En resumen, se trata de una raza de perros originaria de Andalucía que destaca por su característico pelaje y su capacidad para proporcionar tranquilidad a familias con niños. Además, es menos propensa a causar alergias, lo que la convierte en una elección popular entre quienes buscan compañía canina sin complicaciones alérgicas.
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