Madrid, 22 abr (EFE).- Samur Social, el servicio de emergencia social puesto en marcha por el Ayuntamiento de Madrid hace 20 años, en 2004, ha atendido a lo largo de su historia 1,2 millones de llamadas y ha intervenido en más de 225.000 emergencias, además de haber atendido a más de 19.000 personas mayores en riesgo social.

La directora general de Servicios Sociales y Atención a la Discapacidad, María Consolación Alfaro Moreno, lo ha detallado este lunes en la comisión de Políticas Sociales, Familia e Igualdad, a una pregunta de la edil socialista Ana Isabel Lima Fernández, quien se ha interesado por las medidas que va a adoptar el Gobierno municipal del PP para “resolver las carencias del servicio de Samur Social”.

Lima, que ha censurado que el Samur Social “afronta su 20 aniversario en pleno conflicto laboral y crisis de recursos”, ha dicho que en el equipo de Gobierno no son “conscientes de la frustración de los trabajadores” cuando, “con una enorme vocación del servicio”, “no pueden ni proporcionar compañía, ni seguridad ni tranquilidad” a las personas usuarias del Samur Social.

“Y, sobre todo, no tienen respuesta para situaciones muchas veces dramáticas. Todo eso debería tener consecuencias para la empresa (adjudicataria). Hay un funcionario responsable del contrato que debería supervisar el cumplimiento del mismo, corregir las irregularidades, incluso proponer sanciones. Y digo debería porque parece que le es ajeno todo esto”, ha asegurado la concejala del PSOE.

Tras Lima ha tomado la palabra Alfaro Moreno, quien ha subrayado que Samur Social “se ha consolidado como un dispositivo de atención a las emergencias, dando respuesta a las situaciones de vulnerabilidad y riesgo social que pueden sufrir” los madrileños.

A lo largo de sus 20 años de historias, ha abundado la directora general, Samur Social “ha recibido más de 1.200.000 llamadas; ha intervenido en más de 225.000 emergencias individuales y/o familiares, y ha atendido a 19.200 personas mayores en riesgo social”.

Además, Samur Social ha estado presente, junto con el resto de servicios de emergencias del Ayuntamiento, en más de 1.050 emergencias colectivas, y su trabajo ha sido “esencial” en momentos como la pandemia del coronavirus, la borrasca Filomena o la acogida de personas refugiadas procedentes de Siria o Ucrania, ha recapitulado Alfaro Moreno.

En cuanto “al tema de las relaciones laborales de los trabajadores con la empresa”, Alfaro Moreno ha recordado que, “tal y como se establece en el pliego de prescripciones técnicas del contrato, el personal destinado a la prestación del servicio está sometido al poder y dirección y organización del contratista adjudicatario”.

La directora general de Servicios Sociales y Atención a la Discapacidad, que ha sido interrumpida varias veces por trabajadores que seguían la comisión en el edificio de la plaza de la Villa, ha apostillado que el personal “en ningún caso tiene vinculación jurídico-laboral con el Ayuntamiento de Madrid”.

“Con independencia -ha agregado- de las facultades que tenemos de control e inspección que legalmente y contractualmente corresponde al mismo (al Consistorio) y al servicio que la entidad presta”.