Ankara, 13 dic (EFE).- El ministro de Exteriores turco, Hakan Fidan, pidió este viernes a los países europeos que repatríen a sus ciudadanos que fueron a Siria para combatir en las filas del yihadista Estado Islámico (EI).
Fidan criticó que, tras la derrota de este grupo terrorista, conocido también como Daesh, Europa haya facilitado el internamiento de estos excombatientes en campos vigilados por las Unidades de Protección del Pueblo (YPG), las milicias kurdosirias que dominan el noreste de Siria.
Ankara considera a las YPG terroristas por sus vínculos con el proscrito Partido de Trabajadores de Kurdistán (PKK), la guerrilla kurda de Turquía que también recibe la calificación de organización terrorista en la Unión Europea (UE) y en Estados Unidos.
Sin embargo, Washington ha apoyado a las YPG con armamento para respaldar su combate contra el EI desde 2014, y después para mantener los campamentos de internamiento de excombatientes yihadistas y sus familias.
«Los países occidentales utilizan a una organización terrorista para evitar repatriar a sus propios ciudadanos afiliados al Estado Islámico, pasando por alto la carga que esto supone para nosotros», dijo Fidan este viernes en una entrevista exclusiva con la cadena turca NTV.
«Europa debería admitir de vuelta a sus afiliados al Daesh. Es irracional que siga siendo vulnerable al chantaje de las YPG. Lo que llaman lucha contra el Daesh es esencialmente usar a las YPG como carceleros para detenidos del Daesh», criticó el jefe de la diplomacia turca.