Uno de cada tres hogares de la ciudad de Madrid se han visto empobrecidos a lo largo de 2020 debido a la crisis del coronavirus, especialmente aquellos con menores a cargo, y el confinamiento multiplicó por tres el riesgo de sufrir alguna enfermedad mental, con mayor incidencia en la franja de 18 a 44 años.
Este empobrecimiento no se ha producido de la misma forma en todos los tipos de hogares: uno de cada dos hogares monoparentales femeninos se empobreció en 2020, y uno de cada diez lo hizo de una manera «dramática», perdiendo más de la mitad de la renta.
Son datos que se desprenden de un informe sobre el impacto de la pandemia en el bienestar de las familias madrileñas durante 2020 que ha presentado este viernes la vicealcaldesa, Begoña Villacís, junto al delegado de Familias, Igualdad y Bienestar Social, Pepe Aniorte.
Villacís ha expuesto que esta crisis «está afectando gravemente a las familias», sobre todo aquellas con hijos, y también a aquellas que «quisieran tener hijos», algo que para el director general de Innovación y Estrategia Social, Héctor Cebolla, podría «en el futuro generar problemas en relación con la fecundidad, que en la ciudad de Madrid ya es muy baja».
Cebolla ha apostillado que «hay un patrón de crecimiento de la vulnerabilidad muy dramático en aquellos hogares en los que viven niños», por lo que «auguramos que esto dará como resultado un crecimiento de la pobreza infantil en el medio plazo».
Por otro lado, los menores de 35 años «son los que han recibido el mayor impacto en el deterioro de la situación laboral», ha añadido Villacís.
«El 11,6 % de mayores de 65 han sido despedidos, pero este porcentaje se eleva al 18 % en los menores de 35 años, y es más alto todavía en las mujeres: un 23 %», ha desgranado la vicealcaldesa.
‘Madrid 2020: Diagnóstico de la Crisis por covid-19’ compara encuestas municipales realizadas en abril y octubre de 2020, y arroja, asimismo, que hasta un 40 % de los hogares madrileños con menores de 12 años a cargo podría tener problemas de conciliación si no hay presencialidad escolar.
Un 34,1 % de estos hogares declara que se podría ver forzado a reducir la intensidad laboral de alguno de sus progenitores, y un 21,3 % estima que debería dejar de trabajar si sus hijos no asistieran presencialmente al colegio.
Fuente: © EFE 2021.