Madrid, 7 jul (EFE).- El Ayuntamiento de Madrid ha anunciado este jueves que, desde hoy, pueden volver a sus casas los vecinos del número 33 de la calle General Pardiñas, colindante con el 35, que sufrió una explosión el 6 de mayo pasado.
Fuentes municipales han indicado a Efe que ya han finalizado los trabajos en los edificios colindantes al siniestrado.
Queda pendiente, pues, resolver la situación del edificio donde ocurrió la explosión, originada por un posible escape de gas, que provocó dos muertos -dos operarios que realizaban trabajos de fontanería, de 21 y 27 años- y diecisiete heridos, uno de ellos de carácter grave.
El Consistorio informa de que han sido retirados «los últimos enseres que quedaban» en el número 35 de la calle General Pardiñas (distrito de Salamanca), han finalizado los trabajos de demolición parcial y quedan las tareas de apuntalamiento y asegurar la estructura y la estabilidad del edificio.
La previsión del Ayuntamiento es concluir estas labores a finales de julio y «ceder el testigo a la comunidad de propietarios, que decidirá cómo proceder con el inmueble».
En este sentido, los técnicos municipales de edificación «estarán a su disposición para asesorarles en lo que necesiten».
A principios de junio, decenas de vecinos y allegados se concentraron para reclamar soluciones a la situación en la que quedaron los damnificados por al explosión que obligó al desalojo del bloque siniestrado y los dos colindantes.
Según la Asociación de Víctimas y Afectados General Pardiñas, convocante de la protesta, el Ayuntamiento de Madrid «no ha mostrado la sensibilidad suficiente» con los vecinos, cuya principal reclamación es que se les ofrezcan viviendas temporales de similares condiciones a las que tenían y que estén en las proximidades del barrio de Goya.