El ministro sirio de Educación dice que se quitará la propaganda de Al Asad del currículum

El ministro de Educación interino de Siria, Nazir Mohamad al Qadri, durante una entrevista con EFE en Damasco el 9 de enero de 2025. La nueva Siria sin Bachar Al Asad asegurará la enseñanza de las lenguas minoritarias sin discriminación, si bien el árabe será el idioma primario de enseñanza en los colegios públicos, donde la principal reforma ahora será eliminar la propaganda de Al Asad, afirma en una entrevista con EFE el ministro de Educación interino, Nazir Mohamad al Qadri. EFE/Ana María Guzelian

Ana María Guzelian

Damasco, 10 ene (EFE).- La nueva Siria sin Bachar Al Asad asegurará la enseñanza de las lenguas minoritarias sin discriminación, si bien el árabe será el idioma primario de enseñanza en los colegios públicos, donde la principal reforma ahora será eliminar la propaganda de Al Asad, afirma en una entrevista con EFE el ministro de Educación interino, Nazir Mohamad al Qadri.

El nuevo responsable planea atajar también la alta tasa de abandono escolar que prevaleció durante los últimos años de mandato del régimen, del 40 %, y mantener por ahora la gratuidad de la educación dados los niveles de pobreza que sufre la población en el país.

«Hay pasos graduales para enmendar algunas ideas equivocadas y cancelar todo lo relacionado con el régimen hasta que terminemos con esta ideología que prevalecía antes», declaró a EFE en Damasco.

En este sentido, criticó que la «metodología» del Partido Baaz de los Al Asad está impregnada en el currículum académico sirio, que incluye desde los «principios teóricos» de la propia formación política hasta frases de Bachar al Asad y su padre Hafez, que gobernó antes de él.

«Está impuesto a la fuerza en nuestros estudiantes, nuestros profesores y los colectivos», denunció Al Qadri.

Abandono escolar

El ministro de Educación interino de Siria, Nazir Mohamad al Qadri, durante una entrevista con EFE en Damasco el 9 de enero de 2025. La nueva Siria sin Bachar Al Asad asegurará la enseñanza de las lenguas minoritarias sin discriminación, si bien el árabe será el idioma primario de enseñanza en los colegios públicos, donde la principal reforma ahora será eliminar la propaganda de Al Asad, afirma en una entrevista con EFE el ministro de Educación interino, Nazir Mohamad al Qadri. EFE/Ana María Guzelian

El ministro también criticó el sistema de obligatoriedad escolar del anterior régimen, que se aplica a todos los niños de 6 a 15 años y obliga a completar la educación hasta el grado noveno, que se corresponde con un tercer año de instituto.

«No creemos en la aplicación de la educación obligatoria en la misma forma que antes», dijo, y consideró que esta rigidez contribuyó a la alta tasa de abandono escolar y a un «abarrotamiento» de las aulas que no se puede mantener.

Preocupado por el índice de niños que dejan sus estudios, del 40 %, explicó que tomarán medidas para atajar el problema, entre ellas crear programas educativos personalizados para reintegrar en el sistema a antiguos alumnos.

En cuanto al uso de las lenguas, Al Qadri destacó la importancia de la diversidad y aseguró que si bien el árabe seguirá siendo el idioma oficial en las escuelas públicas, las minorías tendrán el derecho de enseñar sus idiomas propios en los colegios privados.

«Mientras los armenios, kurdos y todos aquellos con lenguas diferentes al árabe existen en la sociedad, no hay nada malo en enseñarles sus idiomas, pero los impondremos a todo el mundo», sentenció.

«Es un material que enriquece y las comunidades que hablan estos idiomas tienen el derecho a preservar sus lenguas», agregó el titular de Educación, al recordar que el Gobierno de Al Asad no permitía la apertura de colegios kurdos.

En este sentido, subrayó la necesidad de proteger el asirio, un idioma en peligro de extinción que aún se habla en algunas zonas de Siria pese a su desaparición en otros países, algo que supone un orgullo cultural para los sirios.

Educación gratuita

Al Qadri confirmó que la educación seguirá siendo gratuita «al menos en esta etapa», ya que las familias sufren «pobreza extrema», aún están golpeadas por las consecuencias de los desplazamientos forzosos y muchos perdieron sus casas a causa de la guerra.

El conflicto iniciado en el país después de las revueltas populares de 2011 contra Al Asad también destruyó muchos centros educativos y el responsable afirma que buscarán soluciones no solo para el impacto físico de las bombas, sino también para el psicológico.

«La destrucción de la infraestructura no importa tanto como importa la destrucción del alma humana, compensaremos por todo ello», aclaró, al considerar que apoyar la educación en Siria debe ser una responsabilidad compartida con toda la comunidad internacional.

«Esta tarea está sobre los hombros de toda la comunidad internacional, porque esta comunidad honestamente en el pasado ha descuidado a la gente siria», indicó.

Cree que pedir respaldo para su población es pedir respaldo «para la humanidad», ya que cualquier beneficio para los sirios se traducirá en un beneficio también para la comunidad internacional.

Finalmente, el ministro confirmó que no habrá ningún cambio respecto a la segregación por sexos, que se seguirá aplicando en las escuelas públicas al igual que bajo el anterior Gobierno, pero que no será obligatorio en las privadas.

«Cada región en Siria es diferente de la otra, cada localidad tiene su propia cultura y tradiciones. Tendremos estos aspectos en cuenta y no forzaremos a nadie a diferenciar entre géneros», aseveró.

«Cada región tiene sus propias sensibilidades, cultura y tradiciones, y las preservaremos», concluyó Al Qadri.