Madrid, 6 abr (EFE).- La vicepresidenta primera y ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, ha pedido su apoyo a los grupos parlamentarios del PP, VOX y Ciudadanos para sacar adelante el plan de choque aprobado por el Gobierno contra las consecuencias de la guerra de Ucrania, por «responsabilidad» y «mirando al futuro».
En la sesión de control al Gobierno, la vicepresidenta ha insistido en que el país se encuentra en una «situación grave» y «muy difícil» en la que el Gobierno no puede paralizarse, y por ello ha actuado «con eficacia» y «rapidez», para proteger a los colectivos más vulnerables, apoyar a los sectores mas afectados por la crisis y tener un reparto justo del coste de esta guerra.
Así ha respondido Calviño al diputado del PP Mario Garcés, quien ha reprochado a la vicepresidenta que con sus medidas «España se sumerge en los fantasmas de finales de los años 80» y recupera «aquellas situaciones extremas que pensábamos que no íbamos a volver a ver: escasez, déficit e inflación». «Usted ya forma parte de la peor historia del socialismo español», ha añadido.
«Las familias luchan por sobrevivir en un mar de incertidumbre», ha dicho el diputado popular, quien ha lamentado que el Ejecutivo haya incrementado el gasto público, la deuda pública y la presión fiscal», todo ello con una inflación que se sitúa en el 9,8 %.
Calviño ha acusado al PP de estar «en un bucle destructivo» y no hacer ninguna propuesta constructiva, al tiempo que ha recordado que antes de la guerra «las previsiones de crecimiento de España eran muy superiores a la media europea» y que se ha reducido la deuda y el déficit.
También ha preguntado a la ministra de Asuntos Económicos el diputado de VOX Iván Espinosa de los Monteros, quien ha lamentado que el Gobierno siempre responde a las preguntas de la oposición con un «triángulo mágico» formado por tres cuestiones: «el virus, Franco o Putin».
«Eso está bien como estrategia de marketing, pero la realidad es muy dura», ha dicho el diputado de VOX, quien ha añadido que «los españoles tienen que elegir si comen, si se ‘calefactan’, si ponen la lavadora o si llenan el depósito del coche» y «ustedes no se enteran de nada porque no pisan la calle».
Calviño ha remarcado que una situación de guerra lleva a menos crecimiento y más inflación y ha recordado que algo similar ocurre en otros países de la Unión Europea, por ello el Gobierno trabaja para revertir esta situación y «alcanzar cuanto antes el pico de inflación e iniciar la senda descendente».
«El futuro no está escrito, dependerá de nuestros actos», ha dicho Calviño, quien ha apostado por actuar con «determinación, ambición y eficacia» pensando en los ciudadanos españoles.
Por su parte, el diputado de Ciudadanos Edmundo Bal ha preguntado a Calviño por las «reformas estructurales» que va a poner en marcha el Gobierno y ha subrayado que hasta ahora solo ha visto «parches» y un Ejecutivo que «no hace sus deberes» porque «siempre llega tarde» con reformas que «son poco ambiciosas».
Ha añadido que las medidas incluidas en el plan de choque que deberán ser debatidas en la cámara baja «se han quedado viejas» y «son insuficientes» y ha solicitado, entre otras iniciativas, que «ajuste los tributos», «aumente las bonificaciones» e «incluya la energía nuclear en la receta».
Si esa es su propuesta (apostar por la energía nuclear) ahí «no nos va a encontrar» porque «no es una medida de choque que vaya a reducir los precios a corto plazo ni una reforma estructural que nos dé sostenibilidad y autonomía estratégica a medio plazo, ha remarcado Calviño.