Sevilla (España), 12 jul (EFE).- El portero chileno del Betis Claudio Bravo ha manifestado que sigue «con las aspiraciones muy altas, soñando con ganar otro título acá» tras renovar un año más y afrontar su cuarta temporada en el club español, al que llegó por expresa petición de su compatriota Manuel Pellegrini.
El arquero de Buin ha reflexionado sobre sus metas y objetivos en una entrevista con la televisión del club en la concentración del Betis en Wolfsburgo (Alemania) y ha considerado que no baja el listón de sus exigencias que le llevó a ganar con el club bético la Copa del Rey de 2022 y a tres clasificaciones europeas consecutivas.
«No hay nada más bonito que trabajar durante todo el año para salir en la foto de campeones porque eso luego la gente te lo agradece de por vida», aseveró Bravo, para quien «el tiempo pasa muy rápido» y, a estas alturas de su carrera, echa la vista atrás cuando hizo su primera pretemporada con diecisiete años: «ahora tengo cuarenta y tengo ilusión, siempre la tengo, es lo que te motiva», dijo.
Bravo es una de las piezas clave del vestuario que comanda Pellegrini, quien tiene en su compatriota una de sus prolongaciones en el campo y en la plantilla, en la que el meta de Buin dijo que su «idea siempre fue aportar lo máximo posible en juego y en base a la experiencia», y «esto no llega de un día para otro».
«Siempre he ido con la mentalidad de motivar, de no dejar pasar las oportunidades nunca, ser consciente de lo que nos estamos jugando», afirmó el guardameta, quien ya echa de menos a Joaquín Sánchez en el vestuario y consideró que «algunos darán un paso adelante» para coger los galones del capitán verdiblanco.
Sobre la ampliación de contrato del técnico bético hasta 2026, el portero reconoció que «fue una sorpresa», que lo sabían en el vestuario y que les «cogió en pleno vuelo» hacia tierras alemanas, «pero eso habla muy bien de cómo se están haciendo las cosas en el Betis».
Claudio Andrés Bravo Muñoz comenzó a jugar en el Colo-Colo de su país natal, con el que debutó en la fase de grupos de la Copa Libertadores de 2003 y en el que jugó hasta que en 2006 fichó por la Real Sociedad, equipo en el que estuvo durante ocho temporadas y en el que sus grandes actuaciones llamaron la atención del Barcelona.
Premio Zamora de Primera y Segunda, Bravo recaló en el Camp Nou en 2014 y, dos años después, fue traspasado al Manchester City, en el que estuvo hasta que en el verano de 2020 fue llamado al Betis por Manuel Pellegrini.
