El Ayuntamiento de Cádiz ha confirmado que no cambiará las líneas generales de la Zona de Bajas Emisiones (ZBE) y mantendrá la peatonalización en el casco antiguo de la ciudad
El anuncio, realizado por el concejal de Desarrollo Urbano Sostenible, José Manuel Cossi, asegura la continuidad del proyecto a pesar de ciertas modificaciones en otras áreas de movilidad.
La medida busca proteger el derecho a la circulación de los residentes en intramuros, asegurando al mismo tiempo una atención especial a la actividad comercial y económica en la zona. La peatonalización del casco histórico, una opción respaldada por el anterior gobierno de izquierda, es una respuesta a la Ley de Cambio Climático que impone la creación de ZBE en municipios con más de 50.000 habitantes. Se espera que este proceso se inicie de manera más activa hacia finales de 2024.
El edil destacó la importancia del diálogo con los colectivos más afectados por estas medidas y señaló que la ordenanza que regulará la ZBE se está elaborando con base en una propuesta de la Federación de Municipios y Provincias (FEMP), con la adición de elementos específicos para la ciudad de Cádiz.
Además, Cossi anticipó planes de peatonalización en distintos puntos de la ciudad, como la plaza de Asdrúbal y la plaza de la Reina, enfatizando que se buscará la opinión de los vecinos antes de ejecutar dichos proyectos.
En relación con el transporte público, el Ayuntamiento está revisando la redacción del pliego para adjudicar el contrato del servicio de autobús urbano, explorando la viabilidad de un autobús circular en el casco antiguo para apoyar la peatonalización.
El plan para las ZBE incluye la instalación de cámaras lectoras de matrículas en todas las vías de acceso al casco histórico, sancionando automáticamente a los vehículos no autorizados. Se espera que esta medida se aplique en varias calles, entre ellas Botica, San Félix, Venezuela, y la Avenida Cuatro de Diciembre de 1977.
El Ayuntamiento también introducirá un sistema de etiquetas ambientales, clasificando los vehículos según su impacto ambiental. Esta iniciativa busca mejorar la calidad del aire y reducir gradualmente la presencia de vehículos altamente contaminantes en la ciudad. La etiqueta 0 emisiones y las etiquetas Eco, C y B definirán los privilegios de circulación y estacionamiento en las ZBE, impulsando un enfoque más sostenible en la movilidad urbana.