Luis Prieto: «‘Estación Rocafort’ no es una película para los que se asustan fácilmente»

Como toda gran ciudad que se precie, Barcelona cuenta con numerosas historias relacionadas con su suburbano. Desde las que tienen como protagonistas a estaciones fantasmas a otras que hablan de maldiciones. La película 'Estación Rocafort' se basa en la leyenda urbana de esta parada de metro. Dirigida por el madrileño Luis Prieto (en la imagen), afincado en Estados Unidos desde hace años y autor de títulos como 'Shattered' o 'Kidnap', esta cinta de terror se estrenará en salas el próximo 6 de septiembre, protagonizada por Natalia Azahara, Javier Gutiérrez y Valèria Sorolla. EFE/ Toni Albir

Irene Dalmases

Barcelona, 30 ago (EFE).- Como toda gran ciudad que se precie, Barcelona cuenta con numerosas historias relacionadas con su suburbano. Desde las que tienen como protagonistas a estaciones fantasmas a otras que hablan de maldiciones. La película 'Estación Rocafort' se basa en la leyenda urbana de esta parada de metro.

Dirigida por el madrileño Luis Prieto, afincado en Estados Unidos desde hace años y autor de títulos como 'Shattered' o 'Kidnap', esta cinta de terror se estrenará en salas el próximo 6 de septiembre, protagonizada por Natalia Azahara, Javier Gutiérrez y Valèria Sorolla.

En una entrevista con EFE, Prieto ha considerado este viernes que no es una película «apta para todo el mundo, no es para aquellas personas que se asustan fácilmente o lo pasan mal, porque la película se queda contigo y, si cuando acaba tienes que coger el metro y es de noche, te lo vas a pensar dos veces, vas a sufrir un poquito».

El filme lleva al espectador hasta las tripas del metro barcelonés, de la mano de Laura (Natalia Azahara), una joven inmigrante mexicana que hace poco ha empezado a trabajar allí y a quien le asignan, sin que pueda negarse, la vieja y, aparentemente tranquila, estación de Rocafort.

Sin embargo, pronto descubrirá que en ese espacio, a lo largo de los años, ha muerto mucha gente en extrañas circunstancias y que el lugar desprende una singular energía.

Ante los sucesos que empieza a vivir, pedirá ayuda a Román (Javier Gutiérrez), un alcoholizado expolicía, conocedor en otros tiempos de algunos hechos allí ocurridos, y juntos iniciarán una investigación, de la que no será ajena Cris (Valèria Sorolla), también trabajadora del metro y amiga de Laura.

Un lugar, cuanto menos, oscuro

Como toda gran ciudad que se precie, Barcelona cuenta con numerosas historias relacionadas con su suburbano. Desde las que tienen como protagonistas a estaciones fantasmas a otras que hablan de maldiciones. La película 'Estación Rocafort' se basa en la leyenda urbana de esta parada de metro. Dirigida por el madrileño Luis Prieto (en la imagen), afincado en Estados Unidos desde hace años y autor de títulos como 'Shattered' o 'Kidnap', esta cinta de terror se estrenará en salas el próximo 6 de septiembre, protagonizada por Natalia Azahara, Javier Gutiérrez y Valèria Sorolla. EFE/ Toni Albir

Luis Prieto rememora que se trata de una estación que tiene un pasado «cuanto menos, oscuro, puesto que en su construcción murieron varios trabajadores; fue refugio antiaéreo durante la guerra civil; en los ochenta hubo una serie de accidentes y, más tarde, en los noventa, se convirtió en lugar preferido para suicidas».

Sin embargo, deja claro que su proyecto, con guión de Iván Ledesma, Ángel Agudo y él mismo, es una «película de entretenimiento, destinada a un público que se lo va a pasar bien, aunque eso incluya pasarlo mal. Gente que va a las salas a ver cine de terror porque les gusta el suspense, les gusta tener subidones de adrenalina en un espacio protegido».

«Cuando hago una película -prosigue- mi interés es poner al espectador en los zapatos de los protagonistas para que vivan lo que ellos están viviendo, se asusten con ellos, aprendan con ellos y hagan este viaje juntos».

Huyendo del morbo

Preguntado sobre el hecho de que no haya rodado en la misma estación, sino en otras, Prieto descubre que no es fácil filmar en el suburbano barcelonés y, además, por conversaciones que tuvo con trabajadores de la compañía todavía es hoy un lugar que atrae «lo oscuro, un sitio incómodo».

Asimismo, resalta, pensó que sería más conveniente no convocar lo morboso, respetar la historia y a los familiares de quienes perdieron allí sus vidas.

Justamente, tras conocerse que había iniciado el rodaje del filme, le han llegado una gran cantidad de mensajes de gente que ha trabajado en el metro, como el de una persona que le comentó que un día vieron allí algo extraño, que llevó a pararlo todo, aunque no se acabó encontrando a nadie ni nada entre las vías.

En cuanto a la relación que existe entre la estación de Rocafort y México, el cineasta argumenta que la película, una ficción, explora el origen del mal de la estación, se lleva a cabo «una exploración hacia lo arcaico, hacia nuestro pasado, nuestra historia, hacia lo religioso, lo místico».

Es en esta exploración que hay una conexión con las acciones de los españoles cuando llegaron a América, «donde ocurrieron hechos terribles».

Por su parte, la actriz Valèria Sorolla ha indicado a EFE que su personaje hace el rol de acompañante de Laura, convirtiéndose en su confidente y percatándose «del viaje emocionalmente muy fuerte que ésta emprende, en una película con muchas peripecias». «Y Cris es como el personaje más observador», puntualiza

Tampoco ha obviado que desde que terminó el rodaje, barcelonesa como es, viajar en metro ha cogido una «perspectiva diferente, porque rodamos en las vías, un espacio cotidiano, pero al que accedes tras cruzar un umbral y que se transforma en una cosa diferente».

A punto de estrenar su nuevo filme, producción de Showrunner Films y Nostromo Pictures, Luis Prieto tiene en perspectiva nuevos proyectos, aunque no puede avanzar mucho, más allá de descubrir que alguno podría tener que ver con un archipiélago español.