Río de Janeiro, 6 sep (EFE).- La ministra brasileña de Igualdad Social, Anielle Franco, que sería una de las mujeres acosadas por el ahora destituido titular de Derechos Humanos, Silvio Almeida, felicitó al presidente Luiz Inácio Lula da Silva por la rapidez con que reaccionó a las graves denuncias al destituir a su colaborador.

«No es aceptable relativizar o reducir episodios de violencia. Reconocer la gravedad de la práctica y actuar inmediatamente es el procedimiento correcto, por eso, resalto la acción contundente del presidente Lula y agradezco todas las manifestaciones de apoyo y solidaridad que recibí», afirmó la ministra en un mensaje en redes sociales.

Hasta ahora Anielle Franco no se había pronunciado sobre las denuncias contra su colega de Gabinete ni confirmado que habría sido una de las víctimas, pero los propios mensajes de solidaridad que ha recibido, incluso de la primera dama, Rosangela ‘Janja’ Silva, dan a entender que fue una de las denunciantes.

Lula destituyó este viernes a su ministro de Derechos Humanos, investigado por supuestamente haber asediado a varias mujeres, debido a la gravedad de las denuncias.

«El presidente considera insostenible mantener al ministro en el cargo considerando la naturaleza de las acusaciones de asedio sexual», informó la Presidencia en un comunicado.

Pese a que en el mensaje que publicó en la red Instagram no dijo haber sufrido acoso, Anielle Franco pidió que se respete el derecho de las víctimas a no ser presionadas en momentos de vulnerabilidad.

«Los intentos de culpar, descalificar, humillar o presionar a las víctimas a hablar en momentos de dolor y de vulnerabilidad tampoco pueden aceptarse, porque tan solo alimentan el ciclo de la violencia», afirmó la hermana de la asesinada concejala y militante feminista Marielle Franco.

La ministra pidió que se respete su espacio y su derecho a la privacidad, y agregó que contribuirá con las investigaciones cuando se lo soliciten.

«Sabemos cuánto mujeres y niñas sufre todos los días con asedio en sus trabajos, en los transportes, en las escuelas, dentro de casa… Puedo afirmar que el enfrentamiento a toda y cualquier práctica de violencia es un compromiso permanente de este Gobierno», concluyó la ministra en su nota.

Almeida ha negado vehementemente las acusaciones en su contra y las ha atribuido a una campaña para desprestigiar al único ministro negro del Gobierno y a un histórico combatiente del racismo en Brasil.

Según la Presidencia, las denuncias contra el ministro ya son investigadas por la Policía Federal y por la Comisión de Ética Pública de la Jefatura de Estado.

Las acusaciones contra Almeida fueron ventiladas el jueves por el portal Metrópoles y ratificadas por la organización Me Too, según la cual lo han denunciado varias mujeres, cuyas identidades mantiene en secreto.