Pablo Sáinz-Villegas: la música es democrática y le pertenece a la gente

El maestro de la guitarra clásica española y considerado el sucesor de Andrés Segovia, Pablo Sáinz-Villegas, durante una entrevista con la Agencia Efe. EFE/Abel Alonso

Logroño, 17 may (EFE).- El maestro de la guitarra clásica española y considerado el sucesor de Andrés Segovia, Pablo Sáinz-Villegas, ha asegurado a Efe que la música, como él la entiende, «es para todos, es democrática y le pertenece a la gente».

El maestro de la guitarra clásica española y considerado el sucesor de Andrés Segovia, Pablo Sáinz-Villegas, durante una entrevista con la Agencia Efe. EFE/Abel Alonso

Sáinz-Villegas (Logroño, 1977), quien reside en Nueva York desde 2001, está estos días en su tierra natal con motivo de la celebración de la primera edición de La Rioja Festival, del que es director artístico y que incluye la actuación, entre otros, de la soprano Ainhoa Arteta con la Orquesta Sinfónica de Navarra.

El maestro de la guitarra clásica española y considerado el sucesor de Andrés Segovia, Pablo Sáinz-Villegas, durante una entrevista con la Agencia Efe. EFE/Abel Alonso

La música, ha proseguido, «es un elemento que unifica la condición humana y ese es su poder y su valor» y «la guitarra, de forma especial, es el instrumento más cercano al corazón de las personas y es patrimonio inmaterial de la cultura de España, tan local y, al mismo tiempo, tan universal».

La guitarra, para él, tiene, «desde sus orígenes, una parte vinculada a la música popular y folclórica» y «es ahí donde tiene sus raíces y de ahí nace para convertirse en un puente entre la música popular y la más clásica, es el puente natural que une estos dos ecosistemas».

Se ha definido como «un profesional con corazón de fundación», ya que su «propósito social y profesional es el mismo» y pone «la misma intención al tocar en un teatro contratado que en un colegio de Tijuana para niños».

Además, ha destacado que, en ambas situaciones, él toca «la misma música con el mismo compromiso, la misma pasión y la misma intención: la de inspirar»; y ha señalado la importancia para un artista de «sembrar alrededor tuyo».

Para un joven músico, ha proseguido, «el camino se hace andando y ese espacio, ese jardín, se va cultivando con paciencia, talento, trabajo, disciplina, esfuerzo, pasión y compasión».

«Poco a poco, durante años, uno va sembrando esos anhelos y objetivos y cada día trabaja un poquito para hacer de ese ecosistema alrededor de un músico un sitio de valor y bello», ha subrayado. «Es un estilo de vida que es por y para los demás».

Ha incidido en que, de esta manera, «uno, como artista, descubre que hay una elevación y un dar lo mejor de uno mismo» y «ahí es donde, en el instrumento, el artista ve reflejados sus miedos y sus certezas y ahí puede crecer como ser humano».

Sáinz-Villegas, quien ha tocado en más de 40 países y protagonizado conciertos con las más destacadas orquestas del mundo, considera que los músicos deben «dar lo mejor de ellos mismos, siendo conscientes de que ofrecen un regalo que es para los demás y, al mismo tiempo, les hace sentir bien».

Entre sus proyectos más recientes, ha citado la canción «A prayer for peace», que ha interpretado con el reconocido chelista Yoyo-Ma y de la que es autor el célebre compositor de bandas sonoras de Hollywood John Williams, con quien le une una amistad y «cada cierto número de años me ha dado un regalo musical».

Williams tiene «una agenda muy intensa porque, a pesar de su edad, sigue componiendo, por ejemplo, para la nueva película de ‘Indiana Jones'», ha afirmado.

Además, este guitarrista continuará con su gira de conciertos, que le llevará durante los próximos meses, por ejemplo, a Suiza, París, América Latina y Praga, donde ofrecerá el concierto de Año Nuevo el 1 de enero de 2023, y otro, dos días después, acompañado de la Orquesta Filarmónica Checa.

Junto a su labor artística, está volcado en su proyecto filantrópico «El legado de la música sin fronteras», que fundó en 2006 para acercar la música a las personas como medio para favorecer el entendimiento entre las culturas y que ha permitido compartir su música con más 45.000 niños y jóvenes en España, Estados Unidos y México.

Sergio Jiménez Foronda