Según ha destacado el delegado de Familias, Igualdad y Bienestar Social, ha atendido, en su mayoría, a hombres de entre 23 y 37 años desde su puesta en marcha el pasado 19 de abril
El proyecto piloto de atención psicológica y jurídica a víctimas de LGTBIfobia, desarrollado por el Área de Familias, Igualdad y Bienestar Social, ha recibido nueve denuncias por delitos de odio o discriminación por LGTBIfobia en su primer mes de funcionamiento.
Así lo ha anunciado este lunes el delegado del área social, Pepe Aniorte, quien ha destacado también la programación de 34 actividades desde los Espacios de Igualdad para conmemorar el 17 de mayo, Día Internacional contra la Homofobia, la Transfobia y la Bifobia.
El Área de Familias, Igualdad y Bienestar Social se ha sumado este 17 de mayo a la conmemoración de la eliminación de la homosexualidad como enfermedad mental por parte de la Asamblea General de la Organización Mundial de la Salud (OMS), que tuvo lugar este mismo día en 1990.
Aniorte ha subrayado la importancia de esta efeméride por su transcendencia como cuestión determinante a la hora de abogar por los derechos y libertades de la comunidad LGTBI. Del mismo modo, ha incidido en la labor realizada desde el Ayuntamiento de Madrid para combatir esta lacra.
Un proyecto piloto de atención psicológica y jurídica a víctimas de la LGTBIfobia
De esta manera, uno de los programas que está desarrollando el Consistorio madrileño en este ámbito es el proyecto piloto de atención psicológica y jurídica a víctimas de la LGTBIfobia, en funcionamiento desde el pasado 19 de abril junto a la entidad Arcópoli.
De las nueve denuncias que ha recibido este proyecto, que tiene como prioridad la orientación jurídica y psicológica para las víctimas de tratos homofóbicos, tránsfobos y bífobos, la mayoría se han realizado por hombres homosexuales de entre 23 y 37 años, cinco no se han presentado ante las autoridades judiciales, mientras que cuatro de ellos sí lo han hecho o están en vías de hacerlo.
Asimismo, la mayor parte de los incidentes registrados han sido agresiones verbales y han tenido lugar en la calle. En su mayoría, las víctimas se han puesto en contacto con el servicio con el fin de informar de los hechos ocurridos, aunque también para recibir asesoramiento para denunciarlos y para solicitar apoyo emocional tras la agresión.