Bruselas, 13 ene (EFE).- El secretario general de la OTAN, Mark Rutte, abogó este lunes por que los aliados europeos inviertan en defensa “una pequeña fracción” de lo que dedican a pensiones, sanidad o seguridad social, a fin de garantizar la seguridad de las futuras generaciones.
“De media, los países europeos gastan fácilmente hasta una cuarta parte de la renta inicial en pensiones, sanidad y sistemas de seguridad social, y sólo necesitamos una pequeña fracción de ese dinero para reforzar mucho más la defensa”, indicó Rutte en una comparecencia ante la Comisión de Asuntos Exteriores y la Subcomisión de Defensa del Parlamento Europeo.
Rutte, que participó por primera vez ante los eurodiputados desde que llegó al cargo el pasado 1 de octubre, les pidió que se aseguren de “que todos invertimos más en defensa”.
“Es una inversión en nuestra seguridad y en la seguridad de nuestros hijos y nietos”, recalcó.
Al mismo tiempo, instó a también a “aumentar rápidamente la producción de activos y capacidades cruciales”, como buques, tanques, aviones, municiones, satélites y aviones no tripulados.
“La realidad es que no estamos donde tenemos que estar, todavía no. Nuestra industria sigue siendo demasiado pequeña, está demasiado fragmentada y, para ser sinceros, es demasiado lenta”, comentó el ex primer ministro neerlandés.
Reconoció en cualquier caso que la Unión Europea (UE) esté “redoblando ahora sus esfuerzos para remediarlo”, potenciando la base industrial de defensa, e insistió en que los Estados miembros eviten crear nuevas barreras que “solo aumentarían los costes, complicarían la producción y obstaculizarían la innovación”.
En su opinión, la cooperación transatlántica industrial de defensa “nos hace a todos más fuertes” en un momento en el que Rusia, China, Corea del Norte e Irán están aumentando la colaboración en ese ámbito.
“También debemos evitar duplicar las estructuras existentes. No podemos permitirnos perder tiempo y recursos. Pero todos estamos bien situados para complementarnos mutuamente”, agregó.
Rutte elogió en ese contexto la “impresionante ventaja” que tiene la UE con su mercado interior, “un enorme elemento de poder blando que puede ayudar a que la producción de defensa avance a un ritmo mucho mayor”.
El secretario general aliado se refirió igualmente a que la OTAN debe ser más resistente ante acciones hostiles y “dejar claro” que los sabotajes y otras formas de desestabilización «no quedarán sin respuesta”.
En un momento “particularmente peligroso para la seguridad”, vio “esencial” que la OTAN y la UE intensifiquen su corporación.
“Estoy profundamente preocupado por la situación de la seguridad en Europa. No estamos en guerra, pero tampoco en paz. La buena noticia es que sabemos qué hacer para proteger a nuestra gente y nuestro modo de vida ahora y a largo plazo; solo tenemos que hacerlo”, destacó, en referencia a invertir más en defensa y producir más capacidades.
Dijo que su principal prioridad es una “defensa más fuerte” por medio de “gastar más y gastar mejor, pero también de producir más, no para provocar más, sino para evitar la guerra”.
Insistió, de nuevo, en que la actual meta de gasto en defensa del 2 % del PIB de los aliados “no es ni mucho menos suficiente para estar seguros en los próximos años”, y pidió invertir “bastante más”.
“Ahora estamos a salvo. No lo estaremos dentro de cinco años, así que tenemos que empezar hoy, invirtiendo más en aumentar la producción, mejorar la capacidad de recuperación y apoyar a Ucrania”, concluyó.