El delegado de Políticas Sociales, Familia e Igualdad, José Fernández, ha entregado hoy los diplomas a los 15 participantes de la VI edición del Curso de Formación de Mediadores Interculturales en Cañada Real
Este proyecto, desarrollado en colaboración con la Asociación Barró desde 2014, ha formado a 84 vecinos en mediación social. Fernández destacó la importancia de la mediación para mejorar la convivencia y la cohesión social, señalando a los participantes como agentes clave para hacer de Madrid una ciudad abierta y comprometida con sus ciudadanos.
El programa utiliza una metodología diferenciadora que promociona a referentes naturales para que se conviertan en agentes de cohesión social. Los mediadores sirven de enlace entre los vecinos, las instituciones y los servicios públicos, promoviendo la comunicación y la aceptación mutua entre diversas identidades culturales, además de prevenir conflictos.
La formación, que se ha desarrollado entre febrero y mayo, ha incluido 250 horas de teoría y práctica en habilidades sociales, derechos humanos, multiculturalidad y resolución de conflictos. Los alumnos han realizado prácticas en entidades como Cáritas Cañada, Fundación Secretariado Gitano y Fundación Ibn Battuta. Este curso es parte del compromiso continuo del Ayuntamiento de Madrid y la Asociación Barró para mejorar la integración y la comunicación en Cañada Real, beneficiando tanto a los residentes como a la comunidad en general.
