El reinado de Felipe VI a través de sus medidas de ejemplaridad y transparencia

Imagen de archivo del rey Felipe VI, durante su discurso en el acto de proclamación ante las Cortes Generales. EFE/Paco Campos ***POOL***

Carlos Pérez Gil

Madrid, 17 jun (EFE).- Felipe VI se marcó como prioridad en su discurso de proclamación “preservar el prestigio” de la Corona y “observar una conducta íntegra, honesta y transparente» después del deterioro al que Juan Carlos I llevó a la institución en la parte final de su reinado debido a su comportamiento.

Esta directriz fue la que empujó al monarca desde el inicio a introducir mecanismos de ejemplaridad y transparencia, reforzados en los últimos años para amortiguar el impacto del escándalo causado por el patrimonio oculto en el extranjero del rey emérito y sus irregularidades fiscales.

Éstas son las principales medidas acordadas por Felipe VI para renovar la Corona y hacerla más transparente:

-) Renuncia a la herencia

Una de las medidas más drásticas ha sido la renuncia a la herencia de Juan Carlos I y la retirada de su asignación del Estado en marzo de 2020, a lo que siguió la decisión del Gobierno avalada por don Felipe de que el emérito se marchara a vivir fuera de España por sus escándalos e irregularidades fiscales.

-) El patrimonio del rey

En abril de 2022, mes y medio después de archivarse la investigación de la Fiscalía a Juan Carlos I, Felipe VI decidió desvelar su patrimonio, valorado en 2,57 millones de euros netos, en su mayoría depósitos bancarios y fondos de inversión (2,2 millones), obras de arte, antigüedades y joyas.

Una medida inédita que no se ha hecho extensiva a la reina Letizia ni a sus hijas.

-) Familia real reducida

Tras la imputación de la infanta Cristina y de Iñaki Urdangarin por el caso Nóos, Felipe VI redujo a seis los integrantes de la familia real -los reyes, don Juan Carlos, doña Sofía, la princesa Leonor y la infanta Sofía-, obligados a desempeñar solo sus tareas institucionales.

Las infantas Elena y Cristina quedaron fuera del núcleo del Palacio de la Zarzuela y solo la primera ha representado a la Corona en contadas ocasiones por delegación del monarca.

-) Retirada del ducado

Pocos días antes del primer aniversario de la proclamación y de que se comunicara que Cristina de Borbón iría a juicio con su entonces marido, don Felipe le retiró el título de duquesa de Palma, una medida contundente que llevó a un alejamiento personal que aún perdura.

-) Prohibición de recibir regalos o favores

Los miembros de la familia real no puede aceptar regalos que comprometan su dignidad, así como favores o servicios “en condiciones ventajosas», dinero o préstamos sin interés, y el Palacio de la Zarzuela publica cada año en su web el listado de obsequios, que van a parar a manos de Patrimonio Nacional en su totalidad.

También el personal de la Casa del Rey está sometido a un código de conducta interno para actuar con austeridad y honradez.

-) Reducción del sueldo

Al comienzo de 2015, Felipe VI decidió bajarse el sueldo un 20 por ciento, para lo que se tuvo en cuenta las cantidades que perciben los representantes de las altas instituciones y jefes de Estado de otros países.

El rey ganó aquel año 234.204 euros, mientras que en 2024 recibe 269.296 euros.

-) Auditoría externa de las cuentas

Desde 2015, la contabilidad de la Casa del Rey se ha sometido a una auditoría externa por parte de la Intervención General del Estado, que asume a partir de este año el Tribunal de Cuentas, con el fin de atestiguar el correcto uso del dinero procedente de las arcas públicas.

También acordó la posibilidad de que los ciudadanos soliciten información sobre el funcionamiento de la institución.

-) Publicación de las retribuciones y contratos

La web de la Zarzuela pasó a publicar los datos de las retribuciones de los altos cargos, así como de los contratos y convenios suscritos y del grado de ejecución de sus presupuestos.

Desde 2023, también cuelga los contratos superiores a 15.000 euros y establece mecanismos para impedir el favoritismo o los conflictos de intereses en las licitaciones.

-) Sin símbolos religiosos

Con Felipe VI, los miembros del Gobierno y representantes de instituciones del Estado que acuden a la Zarzuela a jurar o prometer sus cargos pueden hacerlo sin la presencia del crucifijo y la Biblia.

También se ha puesto fin a la tradición de la familia real de asistir a la misa del Domingo de Resurrección en la catedral de Palma con el fin de relegar los actos religiosos al ámbito privado. En el caso de la reina Letizia, acabó con la costumbre de usar mantilla.

-) Más presencia de la sociedad civil en recepciones

Desde su primera recepción oficial, los reyes han extendido las invitaciones a numerosos colectivos, como el de los homosexuales, con el fin de transmitir la cercanía de la Corona a toda la sociedad civil.

En tres ocasiones (2015, 2019 y 2021), han impuesto condecoraciones a ciudadanos desconocidos por ser ejemplo para la ciudadanía, un formato que se repite este miércoles en el Palacio Real.

-) Apertura de los jardines de Marivent

Los jardines del Palacio de Marivent de Palma se abrieron parcialmente al público en mayo de 2017 para que la gente pudiera visitarlos casi todo el año, salvo verano y Semana Santa, y también a los invitados en la tradicional recepción estival de los reyes.

El rey autorizó además que la residencia real de La Mareta (Lanzarote) se destinara a alojar a mandatarios internacionales para promocionar la imagen turística de España.

-) Ningún título nobiliario

Felipe VI no ha concedido ningún título nobiliario en diez años, cuando su padre otorgó 55. En sus reuniones con los nobles, les ha pedido “ejemplaridad”.