El Instituto Municipal del Suelo comienza el mes de mayo con la entrega de diez nuevas viviendas a otras tantas familias mostoleñas. Es la primera entrega de viviendas de este año y la segunda desde que Gabriel Ortega asumiera la Concejalía de Vivienda, después de la entrega de otras doce viviendas a finales del año pasado.

De las diez viviendas, cinco se han entregado a través del sistema ordinario: RESVA. Las otras cinco han sido entregadas a través del convenio suscrito entre Vivienda y Bienestar social para  las familias con menos recursos del municipio.

Gabriel Ortega defiende ha añadido que siguen: “trabajando para que no quede ninguna  vivienda vacía en el parque municipal, siempre con la atención puesta en las familias que más caro han pagado las consecuencias de la crisis”. En este sentido, el concejalha destacado que desde el 2014 en la ciudad se ha pasado de 40 a 71 viviendas en el parque de vivienda social, un 80% más, trabajando así en el mismo sentido de las reivindicaciones de asociaciones como la PAH, Stop Desahucios o la Asamblea de Vivienda.

Estas viviendas forman parte del parque de vivienda pública del IMS. El reparto se realiza sobre cupos establecidos en función de la situación de las personas o familias que lo solicitaron al Registro de Solicitudes de Vivienda en Arrendamiento (RESVA). De esta manera, existen diferentes pisos: para personas con movilidad reducida, para menores de 35 años, familias monoparentales, mujeres que han sufrido violencia de género o mayores de 65 años, entre otros.

El Indicador Público de Renta de Efectos Múltiples que decide el Estado es el encargado de regular las inscripciones. Así, las personas que han podido solicitar estas viviendas y a las que se les ha entregado tienen unos ingresos de entre 7500€ y 23000€ aproximadamente al año por unidad familiar.